El Frente Polisario reacciona contra Sánchez
Marruecos exige a España el control aéreo y la soberanía del espacio marítimo sobre el Sáhara Occidental, tras una cumbre en la que Sánchez evitó hablar del tema "por no ofender".
Madrid - Publicado el - Actualizado
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“Hemos asumido un compromiso de respeto mutuo por el que, en nuestro discurso y en nuestra práctica política, vamos a evitar todo lo que sabemos que ofende a la otra parte. Especialmente lo que afecta a nuestras respectivas esferas de soberanía”. Estas son las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la Cumbre entre España y Marruecos de Rabat. Teniendo esto en cuenta, no se podrá decir ni que Ceuta y Melilla son españolas, ni que el Sáhara es para los saharauis, para evitar ofensas.
Por su parte, José Manuel Albares, ministro de Exteriores, ha vuelto a reiterar hoy el significado de la este discurso de Sánchez. Asegura que estas declaraciones son fruto de una nueva relación basada en el respeto mutuo, en la ausencia de acciones unilaterales en las que ambas potencias vayan por libre, en la transparencia, la confianza y en el no ofendernos los unos a los otros.
Y es que, si el objetivo es el de no ofender a Marruecos, esta es una manera de aceptar todas sus reivindicaciones. Unas reivindicaciones entre las que se encuentra, por supuesto, el Sáhara. Concretamente, lo que nuestros vecinos del sur le exigen al Gobierno -entre otras muchas cosas- es que le transfiera el control del espacio aéreo del Sáhara Occidental, que actualmente está controlado por España. Pero esto no se queda aquí. Los marroquís no se conforman con el control terrestre, sino que sus intenciones se centran también en el espacio marítimo saharaui.
La postura del Frente Polisario
Y claro, como cabía esperar, desde el Frente Polisario ha comenzado a surgir cierto descontento generalizado hacia la postura que recientemente ha tomado nuestro país: la de seguirle el juego a Marruecos. Abdulah Arabi, representante del frente polisario en España, asegura que “utilizando su presencia en el territorio del Sáhara Occidental de manera ilegal y saqueando sus recursos naturales, su meta además es condicionar posicionamientos políticos como la decisión del Gobierno de España”.
La soberanía sobre el Sáhara Occidental no es un tema reciente. Es algo que viene de largo. Desde el año 1975, el territorio saharaui se mantiene ocuado por Marruecos. Mientras, España es la potencia que se encarga de su administración. Y entre tanto, las Naciones Unidas sigue catalogándolo como un territorio no autónomo.
La influencia actual del Frente Polisario
En La Tarde hemos hablado con Carlos Ruiz de Miguel, que es catedtrático de derecho constitucional en la universidad de Santiago de Compostela. El profesor afirma que actualmente es un ejército el que lleva la guerra contra marruecos. Sin embargo “se trata de un conflicto de artillería y tan solo ha habido enfrentsamientos dispersos de tropas en el sur de Marruecos”.
Pero ¿Dónde están sus límites? Pues en “los campamentos de refugiados del sur de Argelia y la franja de población nómada al Este del muro que divide el sahara en dos partes. Es decir, alrededor de un 25% del área real”. A esto habría que añadir la poblacion que ha emigrado a otros países, como España, Mauritania o Argelia y que es miembro también del Frente Polisario. Eso sí, si hay que hablar de armamento y munición, “su principal proveedor es Argelia”.
El referéndum que nunca llegó
“El país independiente como tal, existe”, asegura el profesor Ruiz de Miguel. La República Saharaui, aunque sea el menos comunicado y con menos recursos, tiene su territorio y actualmente luchan por conseguir su totalidad.
El referéndum fue aceptado por Marruecos en múltiples ocasiones y escenarios. En el 81 durante la cumbre de Nairobi, o incluso Hasán II ante las Naciones Unidas. Sin embargo, a partir de la llegada del actual Mohammed VI, todo ha dado un giro de 180º. A finales de julio del 99 cambia la política y se desdice de todos los compromisos internacionales de marruecos.
Por otro lado, también encontramos agentes externos con mucho poder. Ahora, España no quiere ofender a Marruecos, Francia es un fuerte aliado y Estados Unidos, aunque no siempre estuvo de su parte -con la firma del Plan Baker que ratificaba el referéndum-, ahora le tiende la mano a Mohamed VI. Eso sí, Ruíz de Miguel afirma que “no es una causa perdida. Marruecos no ha conseguido derrotar al frente polisario a pesar de su poderío económico y militar. Aunque Marruecos solo cederá si existe una presión internacional insostenible.