La indignación de los ucranianos tras la reunión de Estados Unidos y Rusia: “Hablan mientras nos bombardean, sin Ucrania, es una locura”
Olena vive en Kiev y explicaba en 'La Tarde' la impotencia que sienten y la perplejidad al ver el desenlace en el que no pueden participar tras tres años de guerra
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Tres años de guerra son los que se han cumplido en Ucrania, con un coste de vidas humanas terrorífico. Desde entonces, se ha hablado mucho de cuál va a ser el final de la guerra, de cómo quedará repartido el territorio y, sobre todo, de cuándo llegará ese ansiado fin, especialmente para los ucranianos.
Lo lógico sería que ambos países se sentaran a negociar sobre las posibilidades de llegar a término en esta cruenta guerra pero, sin embargo, estamos asistiendo al desenlace de un conflicto en el que Ucrania, para sorpresa de todos, no tiene ni voz ni voto.
Son Estados Unidos y Rusia los que se han sentado a negociar sobre este final, sin la presencia de Ucrania en ningún caso. Es, por cierto, una foto para la historia: una gran mesa alargada de madera con representantes estadounidenses y rusos a ambos lados.
Del lado estadounidense está el secretario de Estado, Marcos Rubio, y del lado ruso el ministro de Exteriores, el veterano Serguéi Lavrov. Presidiendo esa mesa están dos representantes de Arabia Saudí, que ejercen como mediadores en esta reunión en Riad. Foto para la historia y no tanto por lo que sale, sino por lo que no sale: Ucrania.
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Reunión de Estados Unidos y Rusia sobre Ucrania
De momento, se ha quedado en “seguir negociando”, mientras el final de la guerra se va tornando más real. Y a todo esto, la Unión Europea esperando.
Pero, ¿qué piensan, qué sienten los ucranianos ante esta reunión en la que no tienen nada que decir? Es lo que nos preguntamos en 'La Tarde'.
La indignación e impotencia de los ucranianos
Olena es profesora de español en la universidad de Kiev. Cuando empezó la guerra y la incertidumbre reinaba entre ellos, hace tres años, decidió coger a sus hijos y mudarse a Villaconejos, en Madrid, para huir del horror.
Año y medio más tarde decidió volver a Ucrania, un poco más segura de que podría vivir en Kiev, y echando de menos a su marido y sus padres. Desde entonces, las amenazas no han cesado y sigue asustada por lo que pueda pasar.
“Siguen los ataques rusos, cuando me preguntan si ha mejorado, no puedo decir nada bueno. Desde que empezamos a hablar de negociaciones en serio, bombardean más que antes, no nos dejan dormir y los drones se han vuelto más peligrosos, de hecho hay más. Es bastante peligroso” decía con mucha angustia.
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Ucrania recibe los restos mortales de más de 750 militares caídos en combate
Ella sigue dando clase en la universidad, aunque, durante el invierno, para ahorrar energía, lo hacen online.
Al ver, antes de sus clases, la foto de esta reunión, no ha podido sino sentir una enorme impotencia. “Intentamos, para poder seguir con nuestras vidas, ahorrar energía personal también. Si vemos algo que provoca tantos pensamientos y emociones, intentamos no reaccionar o de manera mínima” comenzaba diciendo.
“Lo ves y dices, vale, hablan de Ucrania sin estar Ucrania. Hablan mientras nos bombardean...Lo que vivimos es una locura, tengo dos hijos que tienen que vivir todo eso, se interrumpe sus clases y bajan al refugio. Me dicen que van a hablar sobre nuestra vida y futuro sin presencia de los representantes de mi país, nos parece una locura” protestaba.
Cuenta que no entiende cómo, en esas negociaciones finales, tampoco hay ningún representante de Europa, cuando ellos son europeos. “Es indignante. Y por ser así, intentamos no meternos mucho”.