¿La Inteligencia Artificial podrá cambiar nuestras emociones?: “Los datos no tienen sentimientos pero..."
Moisés Martínez, responsable de Inteligencia Artificial y Data en Paradigma Artificial, desvela en 'Lo Que Viene' cómo la tecnología modificará nuestro estado de ánimo
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Imagínate que el despertador sabe que lo estás pasando mal y te pone tu canción favorita para levantarte. El control de las emociones parece sacado de una película de ciencia ficción pero está avanzando para hacerse realidad. Moisés Martínez es responsable de Inteligencia Artificial y Data en Paradigma Artificial y cree que “los datos no tienen sentimientos pero las personas que los generan sí” y parte de esos sentimientos pueden incluirse entre esos datos sin que nos demos cuenta.
Martínez forma parte del proyecto 'Mixed Emotions', una plataforma de datos vinculados para el análisis emocional. “Lo hicimos en el ámbito del horizonte 2020” con el objetivo determinado de “extraer el sentido de la frases” que la gente expresa, ya sea en lenguaje oral como en escrito. “En la Inteligencia Artificial el sentido es la connotación de una frase”, y eso es lo que ellos querían descubrir: Si las personas “estaban enfadadas o "qué sentían” al hablar o escribir. Este análisis se fijaba en “la forma de colocar las palabras” o por las “pausas” para ver si se podía detectar el estado de ánimo de la persona que se expresa.
Una realidad muy cercana
La IA se fija en lo que hemos hecho en el pasado para predecir cómo podemos reaccionar en el futuro: “Las compañías ya lo están haciendo”, aclara Martínez. Y hasta nos sugieren “a quién seguir” o “qué comprar".
La tecnología ha llegado a crecer tanto que ahora las máquinas de Julián son “capaces de detectar la expresión facial de alguien con unas cámaras”. Los expertos "han etiquetado" ciertas expresiones reflejando como que alguien "se está aburriendo”. Esto significa que se puede ver "lo que le está ocurriendo”.
Las máquinas “podrán cambiar lo que nos generan esos sentimientos”, no los sentimientos en sí. Lo harán porque si "nos sugieran qué hacer” para cambiar nuestras acciones y así cambiar nuestras emociones. Rubén Camacho es psicólogo experto en nuevas tecnologías y opina que “las redes nos provocan una falsa sensación de control” pero que, en definitiva “es una falsa sensación” porque nos “hiperestimula” y cuando estamos ante un entorno que no podemos controlar nos genera “ansiedad”.
Martínez cree que “todo aquello que nos impacta puede cambiar nuestras emociones” y “aquello que tenemos ofrece más información que antes no teníamos” y eso provoca que estemos “más ansiosos” y que “maximicemos estas emociones”.