Así vive Patricia las ausencias de su marido en alta mar: "Tienes que sentirle siempre presente"

Patricia es hija y esposa de marinero. Su marido se dedica a la pesca de altura en el caladero de Gran Sol, en las islas británicas. Generalmente, los ciclos se repiten: dos meses de navegación y diez días de descanso en casa.

La historia de Patricia es una de tantas familias cuyos familiares trabajan en el mar para abastecer de pescado y otros productos marinos en pueblos y ciudades. La vida de los pescadores y de los que se dedican a la faenas marítimas no tienen nada que ver con la de otros hogares. Patricia ya está habituada, pero reconoce que se le hace duro la ausencia de su marido la mayor parte del año.

“Te tienes que enfrentar a una vida en soledad, tienes tu pareja pero la mayoría del tiempo está ausente. Pero tienes que sentirla siempre presente para que cuando llegue no sea un extraño”, ha revelado en 'Mediodía COPE Fin de Semana'.

Este martes, 16 de julio, la Iglesia celebra la Virgen del Carmen, patrona de la Armada Española y de las gentes del mar, bajo el lema 'Cuidad de los mares; cuidad de sus gentes', poniendo el acento en la contaminación de los mares, la sobreexplotación de los recursos pesqueros y la precariedad de sus trabajadores.

José Filgueira, voluntario del Apostolado del Mar: "El mar te enamora"

Y es que en el Apostolado del Mar, conocido también como 'Stella Maris', son miles los voluntarios que asisten a estos trabajadores. Uno de ellos es José Filgueira, quien en 'Mediodía COPE Fin de Semana' ha subrayado que la labor que realizan es la solidarizarse con la gente del mar, en su caso desde el puerto de Castellón.

“Lo más importante es el apoyo, estar ahí, esa sonrisa, esa mano amiga que nos ayuda a convivir en tierra. Que sepan que tienen una familia aunque no los conozcas con anterioridad. 'Stella Maris' es un familia en tierra para la gente que recala por unos días u horas en puertos distintos”, ha explicado el voluntario.

Como ha recalcado Filgueira, vivir encima de las olas y separado del mundo es duro, “con días más o menos felices”, en los que dejas atrás todos los problemas de manera obligada: “Todos tenemos nuestros problemas en casa pero que no podemos resolver desde la inmensidad del mar, y eso afecta diariamente”, ha reconocido.

De ahí que el apoyo entre los marineros se antoje como un elemento fundamental, aunque lo más importante es el amor que profesan al mar: “El mar te enamora, es una cosa que te entra dentro y te lleva”, sostiene José Filgueira.