El pasado año fallecieron en España 826 personas en un total de 1.196.425 accidenteslaborales que se produjeron. Son más de 2 muertes al día a causa de la siniestralidad laboral. La legislación laboral de nuestro país es una de las más avanzadas del mundo. Sin embargo, todavía hay retos por delante en esta materia. Por ejemplo, el acompañamiento a las víctimas de las siniestralidad laboral.

"Te vas a tu casa y nadie dice nada. En el transcurso de un año y cuatro meses, desde que ocurrió el accidente, nadie se ha dignado a llamarte o a decirte '¿qué tal lo lleváis?'. Desde que nos atendió la psicóloga en la ambulancia, desapareció", cuentan los padres de Daniel, un joven que murió en un accidente en la fábrica en la que trabajaba. Es uno de los testimonios de Perder la vida por ganarse el pan, un documental que ha realizado la Plataforma '28 de abril Stop Accidentes Laborales' de La Rioja con la colaboración de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC). Y es que la Iglesia, a través de la Pastoral del Trabajo, ejerce una gran labor en el ámbito de la seguridad y la salud en el trabajo, como ha explicado hoy en 'Mediodía COPE' Antonio Javier Aranda, responsable de este Departamento en la Conferencia Episcopal.

"La Doctrina Social de la Iglesia (DSI) siempre dice que cualquier preocupación humana es una preocupación cristiana. Y hay dos principios en la DSI directamente relacionados con esta situación. Primero, el derecho a la vida, por supuesto y, segundo, la dignidad de las personas trabajadoras", ha explicado.

Desde 2013, los accidentes laborales no han dejado de aumentar: "Las causas son múltiples: lo que más ha influido en este aumento de la siniestralidad laboral es que también ha habido un aumento de la precariedad laboral. La reforma laboral de 2012 creó unas situaciones de relación laboral que no eran las más favorables para proteger la situación de los trabajadores. Proporcionalmente, los trabajadores inmigrantes tienen más accidentes que los nacionales. Y es que los trabajadores inmigrantes suelen tener peores condiciones que los nacionales".

Desde la Pastoral del Trabajo se han mantenido encuentros con los agentes sociales, sindicatos y patronal, y hay una voluntad compartida de acabar con los accidentes laborales: "Una de las cosas en la que coincidían es el problema que existe en las pequeñas y medianas empresas, porque la seguridad tiene un coste y este tipo de empresas, a veces, invierte menos en medidas de seguridad y de formación. En las grandes empresas, el número de accidentes es menor porque no existe este problema de rebajas costes en esas medidas".