Elisa Blázquez, nutricionista: "Los que viven en contacto con los animales tienen una microbiota más sana"

Recomienda los fermentados, como el yogur, el kéfir o la kombucha, "porque aportan más bacterias beneficiosas"

Elisa Blázquez, en COPE
00:00
Poniendo las Calles

Carlos Moreno 'El Pulpo' y Rosa Rosado conocen todos los entresijos de la microbiota con la nutricionista Elisa Blázquez

José Manuel Nieto

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

En una charla reciente en el programa Poniendo las Calles, Elisa Blázquez, experta en nutrición, compartió con los oyentes claves fundamentales sobre la importancia de la microbiota intestinal para la salud y la longevidad. 

Acompañada de los presentadores Carlos Moreno 'El Pulpo' y Rosa Rosado, Blázquez destacó cómo nuestras bacterias intestinales desempeñan un papel esencial no solo en la digestión, sino también en el envejecimiento y el bienestar general. Según Blázquez, "la microbiota está formada por billones de bacterias, hongos y otros microorganismos que se encuentran en todo nuestro cuerpo, siendo el intestino su hogar principal", un órgano que alberga alrededor de 39 billones de bacterias.

La microbiota y su influencia

La nutricionista explicó que la salud de nuestra microbiota está estrechamente relacionada con la forma en que envejecemos. "Mientras envejecemos, nuestra microbiota también cambia, y este envejecimiento no siempre es positivo", comentó. Una microbiota sana es aquella que mantiene una gran diversidad de bacterias beneficiosas, similar a una "selva amazónica", que es fundamental para nuestra salud. Sin embargo, a medida que avanzamos en edad, el equilibrio bacteriano tiende a romperse, lo que provoca lo que se conoce como "deforestación intestinal". En lugar de una abundancia de microorganismos beneficiosos, aparecen bacterias menos favorables para nuestra salud.

"Una de las claves para mantener una microbiota saludable es la alimentación. El consumo adecuado de frutas, verduras, proteínas, y grasas saludables es esencial, porque estos alimentos proporcionan fibra, el prebiótico que alimenta las bacterias beneficiosas", explicó Blázquez. Además, destacó la importancia de los fermentados como el yogur, el kéfir y la kombucha, que contienen bacterias vivas que ayudan a mantener una microbiota equilibrada.

¿Cómo influye el entorno?

Blázquez también subrayó que los hábitos de vida son determinantes en la salud de nuestra microbiota. "Las personas que viven en contacto con la naturaleza y los animales tienden a tener una microbiota más sana", señaló. Este vínculo con el entorno natural y la exposición a diferentes microorganismos contribuye a un sistema inmunitario más robusto y a una menor inflamación intestinal. En contraste, el estrés, el sedentarismo y el consumo excesivo de medicamentos pueden alterar este equilibrio y promover enfermedades crónicas.

Alimentos que representan la dieta mediterránea, imagen de archivo

Alamy Stock Photo

Alimentos que representan la dieta mediterránea, imagen de archivo

La nutricionista destacó, por tanto, que una dieta mediterránea rica en frutas, verduras, legumbres, y alimentos fermentados, combinada con ejercicio y contacto con la naturaleza, puede ser la receta para una microbiota más saludable y una mayor calidad de vida. Además, apuntó que las personas interesadas en conocer el estado de su microbiota pueden optar por un análisis de heces, que ofrece valiosa información sobre el microbioma intestinal y sus posibles desequilibrios.

Conexión con la longevidad

El caso de María Branyas, quien alcanzó los 117 años y conservó una lucidez excepcional hasta sus últimos días, fue citado durante la conversación. Según los estudios realizados sobre su caso, uno de los factores clave de su longevidad fue su microbiota, que presentaba características propias de una persona mucho más joven. Como señaló el Dr. Eloy Santos, parte del equipo investigador, "la longevidad no se debe a un solo factor, sino a una combinación de genes, hábitos y, en este caso, una microbiota excepcionalmente sana".

Esto pone de manifiesto la importancia de cuidar la microbiota para mantener una salud robusta a lo largo de los años. En palabras de Blázquez, "nuestras células pueden envejecer, pero no tienen por qué volverse disfuncionales", y la microbiota desempeña un papel crucial en este proceso. La nutricionista también destacó que los fermentados son una excelente opción para quienes buscan mejorar la diversidad bacteriana y, por ende, el bienestar general.

Nuestras células pueden envejecer, pero no tienen por qué volverse disfuncionales

Elisa Blázquez

Nutricionista en Poniendo las Calles

Para concluir, Blázquez compartió algunos consejos prácticos para mantener una microbiota saludable: consumir más alimentos ricos en fibra, como frutas y verduras; integrar probióticos naturales, como el yogur y el kéfir, en nuestra dieta diaria; y procurar un estilo de vida activo, que incluya ejercicio regular y contacto con la naturaleza. "Al final, lo que importa es cómo tratamos a nuestro cuerpo desde dentro", concluyó Blázquez.

Programas

Último boletín

17:00H | 31 MAR 2025 | BOLETÍN