Cáritas elogia la labor de sus voluntarios, especialmente en pandemia: "Sin vosotros la sociedad es más pobre"

De cara al Día Internacional del Voluntariado que se celebra este domingo, 5 de diciembre, Cáritas ha hecho público un manifiesto en el que reconoce y agradece la labor de sus más de 80.000 voluntarios, sin cuya entrega, que “huye de protagonismos, cualquier sociedad es más pobre y tiene menos horizonte”.

En el comunicado, la entidad de la Iglesia Católica recuerda que es una jornada para “reconocer, agradecer y celebrar la labor solidaria y generosa que realizan miles de personas voluntarias en nuestros pueblos y ciudades. No sois invisibles pero vuestra acción huye de protagonismos. Sois personas con nombre y apellidos, personas que compartís vuestro tiempo y vuestros dones porque tenéis grandes sueños de amor, de justicia, de fraternidad, y con vuestras vidas los hacéis realidad”, comienza el texto.

Cáritas ha remarcado que tras la llegada de la pandemia a vuestras vidas, lo que ha provocado mayores índices de pobreza, la labor de los voluntarios ha cobrado un mayor valor: “La desesperanza, el miedo y el dolor pasean por nuestras calles y corremos el riesgo de que la indiferencia se convierta en nuestro particular escudo protector. Nos enfrentamos a una emergencia de inhumanidad, de sufrimiento y de soledad, y necesitamos veros, sentiros, escucharos, para que no se nos endurezca el corazón”.

“Hoy queremos agradecer vuestra mirada cálida y vuestra sonrisa, tan necesarias en este tiempo tan crispado, y en el que tantas personas sufren por enfermedad, por falta de empleo o vivienda, por falta de recursos. Sin vosotros cualquier sociedad es más pobre y tiene menos horizontes”, agregan.

Señas de identidad del voluntariado de Cáritas

Con motivo de este Día Internacional del Voluntariado, Cáritas pone el foco en las señas de identidad de sus voluntarios y voluntarias, que se configura en torno a estas claves:

Comprometido que cree en el cambio social hacia una sociedad más justa.

Activo que aporta a la sociedad no sólo desde las tareas realizadas, sino también desde las actitudes expresadas.

Capaz de organizarse y participar desde respuestas colectivas frente al individualismo preponderante.

Coherente desde la acción realizada y que desde aquí crece como persona y como cristiano.

Que plasma, a través de su participación, unos valores como la solidaridad, la gratuidad, la igualdad…

Un voluntariado con disponibilidad para la acción y para la formación, superando la barrera de la buena voluntad y promoviendo una acción de calidad.

Con motivaciones muy diferentes, que se va haciendo día a día por medio de la tarea, la formación y el acompañamiento.