Casilda Finat: “Tenía olvidado a Dios y ahora no puedo vivir sin Él"
Son mellizas, madres todoterreno e influencers Casilda y Ana Finat arrasan en redes sociales donde muestran también su fe
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Es una empresaria de éxito. Sus joyas están de moda. Casilda Finat tiene más de 311.000 mil seguidores y su hermana Ana, supera los 25.000. Son de las influencers más conocidas del panorama actual y, además, profundamente católicas. Llevan su fe por bandera y no dudan en usar Instagram como instrumento para mostrarlo, algo que como ha explicado Casilda a Álvaro de Juana en el programa ‘Ecclesia’ de TRECE, “en la sociedad actual a veces no es fácil. “Hay gente que no ve bien que publique cosas sobre Dios, pero me da igual”.
Las mellizas han crecido en un ambiente cristiano, pero Casilda ha contado que se fue alejando de la religión, “vivo en un mundo muy superficial”. Fue a raíz de un Seminario de Vida en el Espíritu, cuando se volvió a acercar a Dios: “Le sentí súper fuerte, como que me decía, “oye que estoy aquí”… Le tenía un poquito olvidado hasta ese momento”. El retiro lo hicieron las dos hermanas y después, la Marquesa de Griñón, Tamara Falcó, gran amiga de las chicas.
"Tenía vacío por dentro"
“Estamos en un mundo que va tan rápido que todo te aleja”, ha dicho Casilda. “Llegaba un punto en el que tenía muchísimas dudas, que no necesitaba a Dios, pero en el fondo tenía mucho vacío por dentro. Me autoconvencía de que estaba bien”.
Y ahora, Casilda no puede vivir sin Dios. Ha confesado que necesita rezar un rato cada día: “Intento ir al Santísimo porque siento muchísimo a Dios”. Ella y su hermana acuden a la madrileña parroquia de San Germán y Casilda intenta ir a misa todos los días, porque como ella misma ha contado a TRECE, “comulgar es medicina”.
Y es que su reencuentro con la fe le ha cambiado la vida y en su entorno lo notan: “Mi familia dice que tengo mejor humor. Quiero evangelizar y no ocultar lo que siento”.
Rosario por la paz
En marzo de este año además las hermanas Finat y su inseparable amiga Tamara Falcó, asistieron a la macro fiesta del rosario por la paz y viajaron a Cazalla de la Sierra, en Sevilla, para pasar una jornada en el campo rezando el rosario y disfrutando de la naturaleza. Van a procesiones, son muy devotas de la Virgen María y se definen como dos apasionadas del Sagrado Corazón de Jesús, en concreto muy importante para Casilda.
“Desde que consagré mi casa al Sagrado Corazón, todo ha cambiado”. También son asiduas a los retiros espirituales y a las peregrinaciones como el Camino de Santiago o el Rocío, dos experiencias que Casilda ha vivido. “Siempre te da un chute de fuerza y fe, te carga las pilas”, ha contado la influencer a las cámaras de ‘Ecclesia’.
Estas fechas en las que se aproxima la Navidad en casa de Casilda se vive de forma especial. Es madre de dos hijos a los que les encanta la Navidad… “Yo ya he puesto el Belén en casa. Tenemos muy presente que lo principal es celebrar el nacimiento de Jesús”. Y el Adviento también es algo fundamental para ella y su familia, algo que quiere inculcar a los niños, “hay que decirles que lo importante no es recibir regalos, si no esperar a Jesús, que nace”, ha dicho en el programa.
Su amor por Cristo
Su última línea de joyas, está dedicada al catolicismo. Medallas de la Virgen María, del Sagrado Corazón o ángeles de la guarda entre detentes y escapularios, son algunos de sus diseños. Las Finat aprovechan cualquier ocasión para demostrar su amor por Cristo. Para Casilda es necesario ponerse en sus manos: “Dios es súper liberador”, y lanza un mensaje para sus seguidores, a los que invita a seguir a Dios como lo ha hecho ella. “Que no tengan miedo, que confíen y se acerquen poco a poco a la fe, que sea Cristo quien lleve sus vidas”.