¿Cómo conseguir que los jóvenes escuchen la llamada de Dios en un mundo repleto de ruidos e incertidumbres?

¿Qué se espera del sacerdote hoy? ¿Cómo ayudar a los seminaristas que se forman para una vida de servicio a Cristo? ¿Escuchan los jóvenes la llamada? Son preguntas que desde este viernes y hasta el domingo tratarán de responder en el Encuentro de rectores y formadores de seminarios mayores que ha organizado en Madrid la Subcomisión Episcopal para los Seminarios.

Un encuentro que tiene como título en esta edición 'Sacerdotes para una pastoral misionera'. El director de la Subcomisión de Seminarios, Sergio Requena, ha explicado en ECCLESIA que la perspectiva es formar a pastores misioneros, poniendo el acento en esta ocasión en las etapas de formación y periodo de pastoral: “Va orientado a la finalización de los cursos de Teología para la ordenación, en el que se recibe el diaconado”.

Los ponentes del encuentro

La primera ponencia correrá a cargo del secretario de la Congregación para el Clero, Andrés Ferrada Moreira, quien detallará cuál es la dinámica de las etapas en la formación. Para este mismo día se ha reservado un tiempo en el que varios rectores van a plantear los retos y dificultades que encuentran en la etapa de síntesis vocacional.

La jornada del sábado va a girar en torno a tres ponencias. El decano de la Facultad de Teología de Deusto, el jesuita Francisco José Ruiz Pérez, en las dos primeras, aclarará el concepto de liderazgo eclesial y aportará algunas sugerencias para ejercerlo. En la tercera, volverá a intervenir Ferrada Moreira para responder al interrogante ¿Qué se espera del sacerdote hoy?

¿Cómo revertir la falta de vocaciones?

Y es que una de las mayores preocupaciones de la Iglesia en nuestro país son la falta de vocaciones al sacerdocio, aunque Sergio Requena matiza que “más que falta de vocaciones hay una crisis de escucha”, por lo que la misión es que los jóvenes llamados “se pongan a la escucha”.

Una tarea nada sencilla, aunque el director de la Subcomisión de Seminarios precisa que lo más importante es acompañarles en este proceso: “La Iglesia durante el seminario acompaña a esta realidad como su propósito más importante. Si son pocos o muchos los que responden a la llamada va más allá de nuestras posibilidades. Lo nuestro es sembrar, favorecer, quitar obstáculos y dejar a la persona cara a cara con Dios”, ha explicado.

No obstante, el ruido del mundo de hoy dificulta que los jóvenes escuchen la llamada. Como solución, Requena les pide afinar el oído como sucede con la música: “Es afinar el corazón para que crezca la sensibilidad, leer entre líneas y descubrir que Dios nos acompaña siempre”.

Por último, Requena ha comentado en ECCLESIA la importancia de que los jóvenes sean protagonistas de la Iglesia de hoy y del mañana, por lo que es necesario escucharles y darles voz: “Queremos que los jóvenes adquieran el protagonismo que están llamados a tener en la Iglesia, porque es una transmisión”, ha sostenido.