La historia del general de la policía que protege Colombia gracias a una capilla móvil
El General Sanabria respondiendo a un “llamado de Dios”, promovió la creación y servicios de una capilla móvil
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Esta crisis provocada por el coronavirus está golpeando a todo el mundo, y en las últimas semanas ha llegado también a lugares del mundo donde la sanidad no tiene las fuerzas para resistir al golpe.
Sin imaginar la crisis que enfrentaría el mundo este 2020, el General Sanabria respondiendo a un “llamado de Dios”, promovió la creación y servicios de una capilla móvil, que inaugurada el pasado 12 de abril de 2019, lleva a Cristo Eucaristía por las calles de Cartagena (Colombia). Hoy, gracias a este pequeño templo-móvil, los cartageneros reciben al Santísimo Sacramento - Dios mismo- en sus propias casas.
"Lo que nos dice Jesús es el momento de ponerlo en práctica"
Al general la falta de fe es lo que realmente le motiva. "Llevar al Señor Jesús vivo resucitado, a un Jesús vivo presente en la Eucaristía pues en esta prueba que el maligno nos ha colocado saldremos antes con la fuerza de Dios Todopoderoso. Lo que se nos dice en las homilías, en los santos evangelios, es el momento de ponerlo en práctica".
Ante la presencia de la capilla móvil incluso personas protestantes o que no profesan el cristianismo reaccionan de manera positiva, "porque les da esperanza frente a una situación que los tiene en bastante tribulación". Pero también hay algunos protestantes que reaccionan airadamente y critican la presencia de Nuestro Señor en la hostia consagrada. La mayoría, de distintos estratos sociales, lloran y se postran ante Nuestro Señor.
El general ha dejado una reflexión espiritual sobre esta crisis que atraviesa el mundo a causa del Covid-19. "Creo personalmente que a lo largo de tantos años nuestra Santísima Madre nos ha advertido, nos ha dicho que es necesario volcar nuestro corazón, nuestro entendimiento en las cosas de Dios y buscar el refugio en Él, conocerlo, entenderlo y poner en práctica lo que Él dice. Quienes lo conocemos muchas veces no pregonamos ni anunciamos lo que Nuestro Señor pide; se podía suponer que esto sucedería".
"Siempre tuve la vocación de ser policía"
Lo que no es habitual que un General de policía muestre abiertamente su fe y afirma que nunca ha sentido la vocación sacerdotal. "Aunque me eduqué en un colegio salesiano, la vocación que en su momento tuve y mantengo es la de policía; si de pronto tuviera la posibilidad de regresar el tiempo, pero con los conocimientos que tengo de Dios actualmente y al devolverme a la edad de 15 años seguramente sí estaría hoy disfrutando la vocación sacerdotal ministerial y no solo eso sino con el ministerio del exorcismo".
Sobre su vida cotidiana afirma que a las 4 de la mañana recibe el primer reporte de lo que no ha conocido en la madrugada. Su trabajo ha cambiado muchísimo, ha variado bastante, pero eso sí la Santa Misa no la deja. Afortunadamente ahora la Policía Nacional y las Fuerzas Militares cuenta con capellanes; "mi capellán, mi párroco, nos celebra Santa Misa diaria todos los días con sagrada comunión"
Por último ha querido dejar un mensaje para el futuro, un futuro después de esta crisis con el Covid-19 donde cree que aumentará el acercamiento a Dios. Particularmente, dice el general, lo nota dentro de su Institución, "he visto miembros de ella que ahora participan de la Santa Misa, en ese recorrido diario que hacemos incluso en los barrios más peligrosos. Van sin ningún tipo de prevención, a pesar de la misma realidad violenta de esos sectores. Van con ese amor y servicio acompañando a Nuestro Señor, cosa que yo no veía el año pasado, no veía esa fe, ese acercamiento".