La Teología de Benedicto XVI, explicada por Alfred Sonnenfeld: "Entendía cosas que para mí eran problemáticas"
El doctor en Medicina y Teología en la Universidad Internacional de la Rioja mantuvo dos encuentros con Benedicto XVi que le marcaron especialmente, tal y como revela en COPE
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El doctor en Medicina y Teología en la Universidad Internacional de la Rioja y en la Complutense de Madrid, Alfred Sonnenfeld, conoció a Joseph Ratzinger en dos encuentros que le marcaron especialmente, la primera en 1989 y la segunda ya como Papa emérito, en 2017.
Fueron muchos los temas que abordaron en ambas ocasiones, pero tal y como revela en COPE el propio Sonnenfeld, una de ellas fue la relación entre la Religión y la Razón, que para determinados sectores de la sociedad no son compatibles. En aquella conversación, el doctor en Medicina le expuso su teoría al respecto, y que el Papa emérito acogió de buen grado.
“Esto precisamente lo hablé también con Ratzinger, en esa conversación ya del año 2017. Lo que digo, pues mira, es que si tú eres una persona que tiende al bien, que quiere hacer el bien, que eres una persona prosocial, que quieres hacer la vida agradable a los demás, tus genes actúan mejor, es una realidad, esto son experiencias científicas. Y cuando hablaba esto con él pues claro decía 'oh pues claro que bonito'. Las personas buenas se lo pasan mejor, saben disfrutar más de la vida, esto lo digo médicamente. Las personas que se saben autogobernar tiene muchas mejores defensas inmunológicas, no tiene tantos cánceres, no tiene tantas enfermedades cardiovasculares, en cambio la hedónica, pues mucho más”, asegura.
La elección de Ratzinger como obispo de Roma en 2005 lo acogió Alfred Sonnenfeld con impresión, ya que había sido elegido Papa una figura de la que el doctor en Medicina se había nutrido tanto: “Verlo ahí con esas palabras tan sencillas, diciendo que 'no soy más que un operario en la viña del Señor' me pareció genial, es que yo estaba sin palabras. Era un hombre que ya en 1991 tuvo una hemorragia en el ojo izquierdo y luego el año 1995 una embolia, con lo cual ya apenas podía ver con el ojo izquierdo y le pidió entonces a Juan Pablo II que le cesará en sus funciones”, recuerda Alfred Sonnenfeld.
Sobre la niñez de Joseph Ratzinger, el doctor en Medicina y Teología en la Universidad Internacional de la Rioja y en la Complutense de Madrid asegura que su familia es lo que más ha marcado su personalidad, especialmente la figura de su hermano mayor (también sacerdote y fallecido en 2020).
En cuanto al interés de Benedicto XVI por España, país que como Sucesor de Pedro visitó hasta en tres ocasiones, ha recalcado que “es un país en el que hay muchos católicos y hay que reconfortarnos, lo estamos viendo que también aquí falta la fe, no es tan trágico como en Alemania, pero sí que lo es. Es un poco reconfortar a los hermanos, así como lo diría yo rápidamente, sin hacer un análisis profundo”.
También ha recordado cómo vivió el doctor en Medicina y Teología el momento de la renuncia aquel 11 de febrero de 2013. Estaba en Madrid. Asegura que se trató de un gesto revolucionario: “Él renunció porque se daba cuenta de que no estaba en condiciones de irse al Brasil, por ejemplo, a la JMJ”. Asimismo, Alfred Sonnenfeld ha puesto de manifiesto otros hitos logrados por Ratzinger durante su papado, como el hecho de escribir tres tomos sobre Jesucristo: “Esto es interesantísimo porque quiere aportar cosas nuevas o lo ve de otro modo”.
Preguntado por cómo pasará a la historia la figura de Benedicto XVI, Sonnenfeld, confía en que pronto sea reconocido como 'Doctor de la Iglesia' por “su modo de pensar, directamente al grano. Lo bonito de Ratzinger, cuando yo en los años ochenta le leía, es que me hacía entender cosas que para mí eran más problemáticas”.