El Papa Francisco, en el Ángelus: "La guerra es en sí misma un crimen contra la humanidad"

Este 14 de enero, durante el rezo del Ángelus, el Papa Francisco ha pedido no olvidar a aquellos que sufren las consecuencias de la guerra en nuestro mundo: “no olvidemos a los muchos que sufren la crueldad de la guerra en tantas partes del mundo especialmente en Ucrania, Palestina e Israel”.

El Papa también ha explicado que los buenos anhelos que nos deseamos al empezar el año deben traducirse en actitudes sinceras que nos lleven a construir un mundo mejor: “Al inicio del año nos intercambiamos saludos de paz pero las armas siguieron matando y destruyendo. Recemos para que los que tienen poder sobre estos conflictos reflexionen sobre el hecho de que la guerra no es el camino para resolverlos porque siembra muerte entre los civiles y destruye ciudades e infraestructuras”.

Además, el Papa ha sido muy rotundo expresando su deseo de paz y su condena absoluta a todos y cada uno de los conflictos abiertos: “en otras palabras hoy la guerra es en sí misma un crimen contra la humanidad. No olvidemos esto. Los pueblos necesitan paz, el mundo necesita paz”.

Para que finalicen las guerras el Papa propone crear una verdadera cultura de paz basada en la educación. Una tarea a la que todos estamos llamados: “Escuché hace pocos minutos en el programa “a su imagen” al padre Faltas, vicario de la Catedral de Jerusalén. Hablaba de educar a la paz. Debemos educar para la paz. Se ve que aún no estamos en toda la humanidad con una educación que detenga cada guerra. Pidamos siempre esta gracia. educar a la paz.”

El Papa también ha tenido un recuerdo para las víctimas del alud de tierra que el pasado viernes tuvo lugar en el noroeste de Colombia: “no olvidemos rezar por las victimas del alud en Colombia que provocó numerosas víctimas".

En la reflexión que Francisco ha realizado del evangelio de este domingo, nos ha invitado a recordar nuestros primeros pasos junto a Jesús: “esta escena nos invita a hacer memoria de nuestro primer encuentro con Jesús, a renovar la alegría de seguirlo y a preguntarnos: ¿qué significa ser discípulos del Señor? El texto nos ayuda sugiriéndonos tres verbos: buscar, vivir, anunciar”. El Papa ha señalado que la amistad con Jesús debe ser sincera y basada en el amor: “El Señor no busca followers ocasionales. Para seguirlo hay que frecuentarle, escuchar su palabra, dialogar con Él en la oración, adorarlo, amarlo... La alegría del Evangelio es siempre extrovertida, contagiosa. De aquí nace y renace el dinamismo de la evangelización”.

Por último, el Papa Francisco ha pedido a todos los fieles que llenaban la Plaza de San Pedro que no se olviden de rezar por él.