La petición del Papa Francisco a miembros de Cáritas Toledo: “Sean un motor de cambio dentro de la sociedad”

El Papa Francisco recibió este jueves 5 de diciembre en la Sala del Consistorio del Vaticano a los miembros de Cáritas de Toledo (España) para celebrar su 60º aniversario. “Ustedes no son sólo un ejemplo de civismo o de filantropía, sino que se convierten en instrumentos de evangelización, a través del lenguaje universal de las obras de caridad” les alentaba Francisco, que habla a través del testimonio y compromiso de sus voluntarios.

"Motor de cambio dentro de la sociedad"

El Santo Padre les alentó a ser motores de cambio en la sociedad. “Un compromiso que va más allá del bien concreto que se le puede hacer a una persona, asumiendo el desafío de ser motor de cambio dentro de la sociedad mediante la difusión del espíritu de caridad y de justicia, para despertar en todos los que tengan buena voluntad una conciencia más fraterna. O sea, nuestra fraternidad a veces se ‘adormenta’ o no crece, y cuando se fomenta una conciencia más fraterna es para despertar y para hacerla crecer” apuntaba.

"Instrumentos de evangelización a través de las obras de caridad"

El Papa también destacó “el ejemplo de civismo y filantropía de los miembros de Cáritas”, pero también los invitó a ir más allá, a convertirse en “instrumentos de evangelización, a través del lenguaje universal de las obras de caridad, un idioma comprensible para todos”.

“Es curioso, las obras de caridad no necesitan traductor, no hay un diccionario para traducir, es lenguaje universal, lenguaje universal de las obras de caridad, la entiende todo el mundo, es que es un idioma comprensible para todos, escrito con el testimonio y el esfuerzo de todos los agentes de Cáritas, comprometidos con Jesucristo y con su Evangelio”.

Asimismo, Francisco enfatizó la importancia de la formación humana y espiritual para enfrentar los desafíos sociales contemporáneos a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia, recordando la necesidad de trabajar en sinergia con todas las realidades pastorales diocesanas. "No olviden jamás el espíritu de colaboración y sinodalidad", les exhortó.

"Sean maestros de sabiduría"

El Santo Padre animó a los presentes a mantener su misión centrada en Cristo, alimentándose de la oración, la Palabra de Dios, los sacramentos y la atención a los más vulnerables. "Sean maestros de esta sabiduría que el mundo tanto necesita", les instó. Cerró su intervención con una petición que siempre hace durante las audiencias y actos públicos: "Por favor, no se olviden de rezar por mí, que lo necesito mucho".