San Martín de Tours
Cuando es elegido obispo, destacará por su caridad hacia los pobres, impulsando su evangelización
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Ya recuerda San Juan de la Cruz que “al atardecer de la vida seremos examinados en el amor”. Así lo han vivido los Santos. Hoy es San Martín de Tours, que experimentó en su corazón el sentido del verdadero Amor que viene de Dios. Este Santo Obispo, nace en Hungría el año 316. A los quince años se alista en el ejército, siguiendo a su padre que era militar.
Cuando llega a los dieciocho, abandona el paganismo familiar bautizándose. Cuando ya era adulto, deja la milicia para dedicarse a luchar por la causa del Reino de los Cielos. Una vez convertido, funda un Monasterio en Ligugé –Francia-, donde vivirá como monje, consagrado a Dios bajo la tutela de San Hilario. Cuando es elegido Obispo de Tours, destacará por su caridad hacia los pobres, impulsando su evangelización. Ahí queda la impronta del Evangelio donde el Señor asegura que cada vez que lo hicisteis con uno de estos mis humildes hermanos, conmigo lo hicisteis”.
El santoral de hoy, miércoles 11 de noviembre
No faltó tampoco su dedicación en bien del clero, promoviendo su formación espiritual y humana. Ellos eran sus inemdiatos colaboradores en el gobienro de la Diócesis y había que cuidarles. También fue un difusor del Monacato en Las Galias. De ahí sacaba la fortaleza para salir siempre adelante. De la contemplación a la acción caritativa y entregada. Todo esto le hizo un pastor modélico. Muere el año 397.
Dentro de sus numerosos gestos de amor en vida destaca el encuentro con un pobre con el que compartió la capa, apareciéndosele después Cristo con el trozo de capa que él había dado al mendigo. Hay quien dice que fue la prueba del Señor a su siervo para comprobar su fidelidad en la caridad y no falta quien dice que el pobre era el propio Cristo.