Telefónica se salva de la quema en una jornada negativa para la Bolsa, para el euro y para las "criptos"

Sobre el ánimo de los inversores pesa el temor a los efectos negativos sobre la actividad económica que tienen y tendrán el aumento de la inflación y las esperadas subidas de tipos de interés en Estados Unidos y en Europa. Mañana se conocerá el dato definitivo de IPC de España. Según el indicador adelantado que se publicó hace dos semanas, la inflación se ha moderado desde el 9,8 hasta el 8,4 por ciento. No es demasiado. La inflación continúa “comiéndose” a grandes mordiscos los ahorros y los sueldos de los ciudadanos.

La renta disponible de los hogares españoles se reducirá este año en unos 16.700 millones de euros, según las cifras que maneja Funcas, la Fundación de las Cajas de Ahorro. Pero los analistas de Funcas no esperan estanflación, ya que creen que la economía española no entrará en crecimiento negativo en ninguno de los trimestres de este año. Para curarse en salud, el dinero huye de los activos de mayor riesgo y busca refugio en la deuda pública y en el dólar.

Los resultados que ha publicado Telefónica han servido de escudo para el valor en la pésima sesión que ha vivido hoy la Bolsa. La empresa ha sido de las pocas que hoy han subido. Se ha disparado casi un 3 por ciento, hasta 4,78 euros por título. Su beneficio se ha reducido un 20 por ciento en el primer trimestre del año, hasta 706 millones de euros. Pero se ha debido en gran parte a la desconsolidación de su negocio en el Reino Unido. La deuda de la compañía se ha reducido sustancialmente y los ingresos orgánicos están creciendo a un ritmo del 3,2 por ciento. Pese al repunte de Telefónica, el índice Ibex 35 ha perdido al cierre un 1,35 por ciento, hasta 8.200 puntos. Han caído con especial fuerza las acciones de Naturgy, Rovi y Solaria. Signo negativo también en el Banco Santander, pese a que ha amortizado 260 millones de acciones propias procedentes de autocartera. Han aguantado hoy Prosegur, cuyo beneficio neto se ha reducido un 36 por ciento en el primer trimestre hasta 10,6 millones de euros, y Mediaset, que ha visto reducirse el suyo un 35,4 por ciento, hasta 23,7 millones.

Ha sido un día negro en las criptodivisas, que continúan con su abrupta corrección. El Bitcoin se negocia esta tarde a 28.500 dólares, muy lejos ya de los 68.000 que alcanzó a finales del año pasado. Otras “criptos” están sufriendo caídas todavía más profundas. El valor de todas las criptodivisas existentes ha pasado en seis meses de tres billones de dólares a poco más de uno. Los inversores están reduciendo, liquidando más bien, sus posiciones en los mercados de mayor riesgo, entre los que se cuentan las criptomonedas, pero también la Bolsa. El dinero que sale de estos activos busca refugio en el mercado de deuda pública, en el que han subido los precios y bajado sus rentabilidades. Los bonos a diez años de EEUU ha pasado en pocas horas desde el 3,15 al 2,85 por ciento. Las obligaciones españolas al mismo plazo han bajado hasta el 1,90 por ciento, cuando al comienzo de la semana tocaban el 2,30 por ciento.

Paralelamente, el dólar ha subido con fuerza. El “billete verde” se ve impulsado por las subidas de tipos que ha realizado la Reserva Federal y por las que todavía están por llegar. Además, el dólar actúa como valor refugio. Hoy el euro se cambia por 1,04 dólares. Está al caer la paridad entre ambas monedas. Hoy se ha conocido que los precios industriales se han moderado muy ligeramente en Estados Unidos. Han pasado del 11,5 al 11 por ciento en tasa interanual. Las peticiones semanales de subsidios se han mantenido estables en torno a las 200.000.