¿Cuánto cuestan? ¿Cómo funcionan?: todo lo que necesitas saber de los test a la venta en farmacias

Este martes se ha aprobado en el Congreso de Ministros el real decreto que dará pie la venta y distribución de tests rápidos de autodiagnóstico en farmacias, sin necesidad de prospecto médico. La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez García, ha hablado después del Consejo y ha explicado que sea test de anticuerpos o test rápido, la venta no necesitará de ningún tipo de receta.

La venta de estos test se hará en farmacia, y comenzará este jueves 22 de julio, tal y como se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado. Esta información la dio la ministra de Sanidad, Carolina Darias, durante el Consejo Interterritorial de Salud del pasado 14 de julio. En estas declaraciones explicó que esta medida es conveniente para evitar la saturación de hospitales y de centros médicos.

¿Qué tipo de test son?

Todos los test que se venderán serán test rápidos de antígenos, unos tests que pierden un porcentaje alto de la fiabilidad en personas asintomáticas. Las ventajas de este test son su rapidez y sencillez. No requiere reactivos caros, ni máquinas, ni personal técnico cualificado. Son mucho más baratos que la PCR. Suelen estar manufacturados como un test de embarazo: se toma una muestra de la nariz con un bastoncillo o de la saliva, se añaden unas gotas de un reactivo que extrae los antígenos del virus, se coloca en el dispositivo y se esperan menos de 30 minutos a que aparezcan las bandas reactivas correspondientes.

Su especificidad (la probabilidad de que una persona sana dé resultado negativo) es similar a la de la PCR. Esto quiere decir que el número de falsos positivos es bajo. Pero su sensibilidad (la probabilidad de que un infectado de resultado positivo) es menor que la de la PCR.

Todos los test de antígenos de autodiagnóstico, según señala el Ministerio de Sanidad, son evaluados por un organismo notificado. Se trata de un organismo independiente designado por las autoridades, que audita a los fabricantes de productos sanitarios, verifica que el diseño y la información son adecuados para que sea utilizado por no profesionales y que cumple con los requisitos esenciales. Si la evaluación es satisfactoria, emite un certificado CE.

¿Cómo debemos hacernos la prueba?

Generalmente, todos los test de autodiagnóstico tienen sus propias instrucciones donde notifican todos los pasos a seguir para hacerse una prueba.

Lo importante, para que el test se haga de forma correcta, es conseguir muestras de secreciones nasales, por lo tanto para ello hay que introducir el bastoncillo en cada fosa nasal durante una profundidad de unos 3 centímetros y hacer contactar la punta con las paredes de la fosa nasal.

Una vez que se obtiene la muestra de las dos fosas nasales, se inserta el bastón el tubo y se gira con fuerza haciendo contacto con el fondo del tubo y con las paredes laterales.

Por último, se debe sacar el dispositivo de diagnóstico y vertir cuatro gotas de la solución interna del tubo dentro del agujero de diagnóstico y esperar alrededor de 20 minutos para conocer el resultado.

Si únicamente hay una raya, significa que el resultado es negativo. Si no hay rayas, significa que el resultado es nulo. Si hay dos rayas, significa que el resultado es positivo. En caso de que haya dudas por la visibilidad de la segunda raya, significa que no es concluyente, por lo tanto, seguramente en la siguiente prueba o en una prueba PCR sea positivo.

Según fuentes cercanas a COPE.es, las llamadas a farmacias preguntando sobre estos test son constantes aun días antes de que sea legal su venta. Por lo tanto, seguramente esta iniciativa sea un éxito.