La fiscal del juicio de 'La Manada': "Los hechos se produjeron sin consentimiento y bajo violencia"
La Fiscalía mantiene la petición de 22 años de cárcel para cada uno de los cinco acusados de violar a una chica en los sanfermines
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La Fiscalía ha sostenido este lunes que los cinco jóvenes andaluces acusados de violar a una chica de 18 años en los sanfermines de 2016 actuaron de forma "conjunta y coordinada", lo que dejó a la denunciante "sometida" y "sin posibilidad de resistencia".
Esta es la primera sesión del juicio a puerta abierta y en ella presentarán sus conclusiones las acusaciones, empezando por la fiscal, para quien ha quedado "acreditado" que existió un delito continuado de agresión sexual en grupo, oral, vaginal y anal.
De igual forma ha considerado probado que también concurrió un delito contra la intimidad por los vídeos que grabaron los acusados, y que todos ellos son culpables del robo del móvil de la joven porque lo conocieron y lo hicieron para dejarla "indefensa", por lo que ha mantenido su petición de 22 años y 10 meses de cárcel para cada uno
Ha añadido asimismo que la joven madrileña fue "humillada y vejada" por los acusados, que se valieron no solo de su superioridad física y numérica sino de las circunstancias ambientales, del lugar elegido: un cubículo ciego de muy reducidas dimensiones y situado en "el sitio más recóndito" del portal donde sucedieron los hechos.
Y en estas circunstancias ha rechazado que se exija a la joven el comportamiento de una heroína o una resistencias que podía haberle puesto en mayor peligro.
Tras dar por "acreditado" cómo se conocieron, el poco tiempo que estuvieron juntos, el recorrido que hicieron en dirección hacia el lugar donde la joven tenía su coche y en el que les dijo que iba a dormir, por o que ellos se "ofrecieron a acompañarle", la fiscal ha destacado la "inocencia" de un chica universitaria, que lleva una vida "normal" y con relaciones "estándares".
Por lo que ha puesto en duda que en aquella madrugada del 7 de julio quisiera mantener relaciones sexuales de diverso tipo y con varios hombres a la vez a los que acababa de conocer.
Esta falta de relación previa le ha llevado a poner en valor la credibilidad subjetiva del relato de la denunciante, que carecía de motivos espurios, como también ha subrayado su credibilidad objetiva ya que "ha mantenido siempre la coherencia" y su testimonio ha sido "ajustado, sin exageraciones".
En este punto ha calificado además de "no creible" el testimonio de la policía municipal que tomó declaración a la chica en su momento y que el pasado jueves, citada por la defensa de un acusado, dijo que la joven "sabía" que le habían grabado, algo no consta ni en el informe de la propia agentes ni en ninguna de las declaraciones de la denunciante.
Ha criticado además el informe que se encargo sobre la joven a unos detectives privados, del que no se ha ocupado porque el jueves no fue ratificado, y ha aseverado que los procesados han incurrido en contradicciones entre ellos al testificar sobre cómo sucedieron los hechos.
Se ha referido asimismo a los informes policiales sobe los vídeos, "la prueba de cargo", para señalar que destacan las palabras "imperativas" que dirigían a la joven, como "no chilles o "chupa aquí", y las de "colaboración" ente ellos, con frases como "vamos a organizarnos".
Unos vídeos grabados al principio, en medio y a final de los hechos que se juzgan, por lo que se aprecia que los acusados mantuvieron la actitud en el tiempo, igual que la chica su actitud "pasiva, de bloqueo", "con los ojos cerrados, ni una mirada, ni una sola palabra" y algún gemido de "dolor".
Poco después fue encontrada en un banco en una calle cerca del portal por una pareja que ha testificado que se encontraba "desconsolada, con un llanto muy amargo".
Para la fiscal esta opinión encaja con la valoración de policías, psicólogos y medico forense, que vieron a joven nerviosa, en estado de shock y asustada, ya que pidió por favor a una agente que no a dejara sola.
Y mientras los imputados confiaban en la "impunidad" que les podía proporcionar una fiestas multitudinarias como los sanfermines, idea que avalaron cuando tras ser identificados por la Policía Foral en la plaza de toros a la hora del encierro les dejaron marcharse, y de hecho no borraron los vídeos que tenían en sus teléfonos.
MARTES
El martes está previsto que presenten sus conclusiones las defensas de los cinco acusados, tres letrados que pedirán la absolución de sus clientes por todos los cargos, excepto por el robo del móvil de la joven que ha admitido uno de ellos, un guardia civil que dijo haberlo sustraído por "avaricia".
De hecho, salvo por este robo, el pasado día 22 los cinco se declararon ante el tribunal "inocentes" de los cargos que les imputan, mientras que en las jornadas siguientes sus defensas han asegurado en todo momento que las relaciones fueron consentidas y en su opinión así lo acreditan entre otros elementos las imágenes que los propios procesados grabaron.
Una versión que no comparte el abogado de la joven, que calificó las imágenes de "repugnantes", ni tampoco los policías que han analizado las imágenes y el sonidos de los vídeos y en sus informes hablan de la "humillación" de la chica, el tono "imperativo" de los procesados, o una actitud "pasiva" por parte de la joven.
Esta opinión sería compatible con el "shock" en el que la denunciante dijo haber entrado ante la situación, en la que no opuso resistencia por la superioridad física y numérica de los acusados.
El criterio de los policías encajaría también con la opinión de las técnicas municipales que asistieron a la denunciante en un primer momento, cuando estaba "desconsolada", y con el estrés postraumático que apreciaron las psicólogas forenses cuando la evaluaron ya en octubre.
También el jueves testificó la policía municipal que tomó declaración a la chica y su comparecencia sostuvo por primera vez que la joven "sabía" que la estaban grabando pero no lo hizo constar en la denuncia, un comentario que contradice la versión dada por la denunciante hasta ahora.
Este comentario ha creado una controversia entre la partes, ya que mientras la acusación particular le resta importancia y lo atribuye a un error de la agente por el tiempo transcurrido, las defensas de los acusados ven este testimonio como trascendente.
Como prueba documental consta además en el sumario un informe encargado a unos detectives privados por el abogado de un militar imputado en la presunta violación y que recoge un seguimiento hecho a la chica en las redes sociales.
Los detectives estaban citados para testificar sobre este informe el mismo jueves, pero finalmente no lo hicieron al renunciar la defensa al mismo, por lo que solo ratificaron una fotografía obtenida de Instagram y aportada por otra de las defensas, en la que se ve la frase "Hagas lo que hagas, quítate las bragas", popularizada por una concursante de un reality.