El error que cometes al cocinar una hamburguesa en casa y que te puede costar una visita al hospital

A la hora de cocinar, cada maestrillo tiene su librillo, pero hay una serie de medidas que tenemos que tomar para evitar intoxicaciones

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Hay que tener cuidado a la hora de hacer hamburguesas en casa

Jesús Tobarra

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Aunque en España hayamos sido siempre más de bocadillos, una vez que entraron las hamburguesas en nuestro país, estas han sabido hacerse un hueco en todos los estómagos. Camines por la ciudad que camines, no tardarás en encontrar alguna cadena de comida que te ofrezca un amplio abanico de hamburguesas.

Pero este plato no es exclusivo de grandes empresas, sino que en la gran mayoría de pequeños bares también tendrás a tu disposición, por lo menos, una hamburguesa con sus ingredientes fundamentales.

Quizás, esto de los ingredientes fundamentales se haya quedado algo obsoleto, teniendo en cuenta la enorme cantidad de combinaciones que se hacen con diferentes ingredientes, tanto salados como dulces, para ofrecer una hamburguesa particular que consiga destacar en un mar de pan con semillas de sésamo y carne.

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Hay una gran cantidad de hamburguesas y todas quieren destacar

Y para todo aquel que considera que no puede innovar o prefiere volver "a los orígenes", optará por ofrecer una carne de alta calidad. El problema está en la idea de que para poder degustar todos los matices de esta, el punto de la carne tiene que ser muy poco hecha o casi cruda.

El problema detrás (o dentro) de la carne cruda

Si te hablamos de los microorganismos como Escherichia coli productora de toxinas Shiga o STEC, probablemente no te suene, pero al mencionar la bacteria E. coli, algo seguro que se remueve dentro de ti. Literalmente.

Esta bacteria forma parte de la microbiota habitual de nuestro intestino, también del de los animales rumiantes, y se elimina a través de las heces. Aunque la mayoría de las veces son inofensivas, las hay que pueden causar toxiinfecciones alimentarias graves.

Después de tres o cuatro días de haberla comido, la bacteria produce toxinas que dan vómitos, fiebre, diarrea aguda y calambres abdominales. 

Si bien es cierto que en la mayoría de los casos la enfermedad desaparecería a los cinco o siete días, hay personas que son especialmente sensibles, como mujeres embarazadas, ancianos, menores de tres años o personas inmunodeprimidas, que pueden tener complicaciones.

Dos avisos recientes

La carne se contamina con STEC debido a una incorrecta higiene en el hogar o en establecimientos alimentarios. Una vez que está presente en la superficie de la pieza, cuando la troceamos o picamos, se extiende la contaminación a toda la carne.

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Al picar la carne, se extiende la contaminación

Por este motivo, es habitual que la culpa la tenga una hamburguesa u otras recetas con carne picada. Recientemente, hemos podido ver dos brotes relacionados con este problema: uno en Pamplona, durante el evento The Champions Burger, y otro en Estados Unidos, vinculado a la hamburguesa "cuarto de libra" de McDonald's.

Mientras que en el de España se vieron afectadas al menos 23 personas, el de Estados Unidos ha dejado ya a 49 afectados e, incluso, una persona fallecida.

Qué podemos hacer para evitarla

Las recomendaciones por parte de la Asociación Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) son:

  • Para cuando cocinamos la carne en casa, lo mejor que podemos hacer es evitar contaminaciones cruzadas y cocinarlos a una temperatura igual o mayor de 70 grados durante al menos 2 minutos. Además, si vamos a picar nosotros la carne, podemos saltear la pieza de carne antes para asegurarnos de eliminar la contaminación de la superficie.

  • Para cuando estamos en algún restaurante, la AESAN recomienda pedir la carne bien hecha, ya que cuanto más cruda esté, mayor es el riesgo al que nos enfrentamos. Aunque el tono rojizo pueda ser muy atractivo, también indica una menor cocción, arriesgándonos a las bacterias peligrosas.