¿Si tengo frío adelgazo? Así es cómo el frío afecta a nuestro cuerpo

Las navidades hacen que ganemos entre uno y dos kilos de peso, según los cálculos que son más optimistas. Pero hay un aliado que es capaz de limitar el peso que ganamos y que puede incluso quemar la grasa blanca, que es la que acumulamos en forma de michelines, se trata de la grasa parda o tejido adiposo marrón.

Según la directora del grupo de Epigenómica en Endocrinología y Nutrición del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago, del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS), Ana Belén Crujeiras, el tejido adiposo pardo es el que "utiliza el exceso de energía que ingerimos para generar calor mediante un mecanismo denominado termogénesis, gracias a la elevada cantidad de mitocondrias que contiene". Esto significa que esta grasa quema la grasa blanca, que es el exceso de energía almacenada que ingerimos en los alimentos, que se almacena en forma de gotas de grasa en el tejido adiposo blanco.

En situaciones de obesidad, la cantidad de tejido adiposo blanco está muy incrementado y que no funciona correctamente, liberando sustancias que no son nada buenas para la salud. Estudios recientes han demostrado que es posible inducir, en los adultos, la conversión de tejido adiposo blanco en tejido adiposo pardo a través de diversos estímulos. Por esta razón, según la Dra. Crujeiras, "se está proponiendo como una posible diana terapéutica para la obesidad".

Según el investigador, biólogo y divulgador, Ricardo Moure, "los recién nacidos tienen un montón de tejido adiposo marrón (...). Cuando salimos al mundo exterior pasamos a un mundo frío donde tenemos que generar nuestro propio calor. De hecho, los bebés no tiritan, su musculatura no está lo suficientemente fuerte y desarrollada como para calentar el cuerpo tiritando y, por eso, son muy dependientes de este tejido adiposo marrón y del calor que este genera".

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Sin embargo, para que este tipo de grasa trabaje (la grasa parda), tenemos que activarla para poder controlar nuestra ganancia de peso. Según los cálculos del Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), esta ganancia de peso, por estas navidades, puede aumentar hasta 4 kilos de media. Por este motivo que activar nuestra grasa parda es crucial para ayudarnos a perder peso. Según la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), hay dos formas de incentivar la actividad de la grasa parda (en la práctica cotidiana) que pueden ayudar:

Todavía falta mucho por investigar sobre la grasa parda. Pero, si se investiga a fondo, será posible poder incorporar nuevas herramientas en la lucha contra el sobrepeso que sufren 6 de cada 10 personas en España, y contra la obesidad, con la que conviven casi 1 de cada 4 adultos y casi 2 de cada 10 adolescentes en nuestro país.