Cuatro orejas para el valor de Tomás Rufo en su alternativa en Valladolid

Quién le iba a decir a Tomás Rufo, que el toro de su alternativa, marcado con el número 100 y con el hierro de Domingo Hernández lo tenía predestinado. El toro soñado por cualquier toricantano. Faena de torero con mucha experiencia, en tiempo y forma. Bien con el capote incluído el excelente quite por gaiteras. Ceñido en todo momento con la muleta, siempre por debajo de la pala del pitón. Series con ligazón, reunión y mucha profundidad, hicieron que el conjunto de la faena en el toro de su alternativa fuese cumbre. Un estoconazo hasta los gavilanes le valieron las dos orejas de manera incontestable.

En el sexto, Rufo tuvo ante sí al otro toro. También de Domingo Hernández, pero de otra vaca. Hasta dos veces salió por los aires cayendo de manera fea, después de un arrimón de esos que enmudecen la plaza. Antes, manejó las distancias, en este caso cortas, debido al escaso empuje del animal. Aun así el toledano solventó el atragantón y tirando de mucho valor recetó otro espadazo que le valió otras dos orejas.

El Juli, siempre esperado en Valladolid, cuajó al primero de su lote con la solvencia que es marca de la casa. Quitó a pies juntos antes de comenzar la faena de muleta alargando la embestida del de Domingo Hernández debido a su escaso empuje. Dos tandas de derechazos ligados y de figura encajada. Recurrió a las cercanías en el último tramo, con circulares y luquesinas muy jaleados por el público. Un pinchazo precedió a una estocada y un descabello que le valieron una importante oreja.

En el segundo de su lote, este con el hierro de Domingo Hernández, lo toreó a placer. Muy atalonado en todo momento instrumentó una faena de las que te dicen de la maestría del Juli, destacando por la templanza y la despaciosidad. Dos orejas de verdad.

Preciosas las hechuras del primer toro del lote de Manzanares. Remató el recibo capotero con una media que paró el tiempo. Muy noble en la muleta, pero de escaso empuje y sin humillar lo suficiente para interpretar el toreo del alicantino. Las pausa y los tiempos marcados durante la faena, fueron muy importante para poder sacar algo del escaso fondo que tenía el astado en una faena que casi en su totalidad se hizo a favor de querencia. Pinchazo, estocada y ovación tras un aviso.

Bien presentado el que hizo quinto, al que recibió Manzanares en el tercio con una larga cambiada. Bien en varas, atemperando el poder que tenia el de Domingo. Siempre cosido a la pañosa, Manzanares tuvo importancia en todo lo que hizo. Se empeñó en matarlo en la suerte de recibir, y tuvo que entrar en dos ocasiones para dejar en lo alto una estocada.

Valladolid, sábado 11 de septiembre de 2021. 2ª de Feria. Casi lleno sobre el aforo permitido.

Dos toros de Garcigrande (2º y 3º) y cuatro de Domingo Hernández, bien presentados y de diferentes comportamientos. Muy interesante en su conjunto.

Julián López El Juli, oreja y dos orejas.

José María Manzanares, ovación y oreja.

Tomás Rufo, que toma la alternativa: dos orejas y dos orejas.