Cómo resistir a la tentación de picar en la bandeja de los dulces navideños: "Compra a última hora"

Son días de muchas cenas, comidas, salidas y descontrol en la alimentación, esto al final hace que nuestro cuerpo se resienta. Natalia de la Rosa es nutricionista de HMIMI Toledo y nos contaba que “lo importante es tener una buena rutina en nuestro día a día, para que esto nos ayude a que cuando tengamos eventos puntuales, lo podamos gestionar mucho mejor”.

Se trata de gestionar, “sobre todo en cuanto a cantidades, el desayunar como cualquier otro día, hacer medias mañanas, hacer meriendas para no llegar con un hambre voraz a estas comidas principales y que tengamos, como estamos diciendo, la posibilidad de seguir metiendo algo de verdura, que las proteínas que podamos hacer, carnes, pescados, mariscos, fuesen más bien cocidos o a la plancha”.

EJEMPLOS DE COMIDAS

Hay tradiciones muy ricas y muy sanas como por ejemplo la lombarda, es muy típica de las fiestas navideñas en algunas zonas y son platos que podemos recuperar con caldos, cremas, verduras. Natalia nos contaba que es un “plato súper rico que la puedes hacer con frutos secos, con manzana, con frutas en general. Podemos hacer una sopa, las típicas sopas de marisco, que son un poquito más ligeras. Y tener presente también el elegir un par de platos y no hacer 25.000 porque se nos solapan. Y al final comemos muchísima más cantidad de la que necesitamos, que es un dato importantísimo”.

Cuidado con esas bandejas de turrones, chocolates y de mazapanes que constantemente tenemos expuestas en la cocina o el salón.

La pregunta es ¿para qué necesitamos poner esas bandejas? Pues nuestra nutricionista de confianza nos aconseja comprar “justo cuando lleguen esos días puntuales y comprar las raciones justas evitando comprar tantísimas cantidades. Nos va a ayudar a ahorrar dinero y a evitar que lo podamos ir consumiendo a lo largo de todos estos días”.

Si tomamos estos consejos, los ponemos en práctica y nos ceñimos a solo “pecar” los días de fiesta, la vuelta a la rutina será más llevadera y “evitamos ponernos como castigo lo de: 'en enero empiezo', porque así nunca vamos a encontrar el momento perfecto para empezar a cuidarnos”.