El Milán sonroja a un Valencia Basket sin alma (83 a 52)

Los valencianos muestran su peor versión de la temporada, recordando mucho al equipo de la 22/23: sin intensidad ni orden. Las bajas de Chris Jones y Bouba Touré no son excusa

El Milán sonroja a un Valencia Basket sin alma (83 a 52)

Fermín Rodríguez

Valencia - Publicado el - Actualizado

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El Valencia Basket ha visitado a un equipo que llevaba sólo una victoria, pero ganar a domicilio en la Euroliga nunca es sencillo y menos si enfrente tienes a Nikola Mirotic. Pero lo peor es pensar que con poco te dará para ganar. En sólo noventa segundos de juego, los valencianos ya se han dado cuenta de qué iba el tema. Tres rebotes ofensivos de los italianos y 6 a 0 inicial. El listón de energía y mentalidad estaba para una pachanga de pretemporada, pero no para competir en Milán.

Además, sin Jones lesionado y con Jovic mermado por el mismo virus que ha dejado fuera de combate a Touré y ha obligado a Pradilla a viajar con urgencia esta mañana desde Valencia, Álex Mumbrú le ha dado pronto el equipo a Harper. El norteamericano, determinante cuando toca anotar, no tiene entre sus virtudes la gestión y el control del juego. Entre que el equipo ha salido blando y que necesitaba un faro, hoy los taronja han sido una lágrima en ataque. Mirotic se ponía morado ante las facilidades defensivas y ha anotado 14 puntos en un primer acto que ha dinamitado Flaccadori, con cinco puntos consecutivos y buenas acciones atrás para cerrar los primeros diez minutos con un peligroso 23 a 12.

Mumbrú ha dado entrada a Guillem Ferrando en el segundo cuarto, buscando ese orden, esa paciencia para construir mejores situaciones, pero hoy no era el día. La defensa seguía sin funcionar, los italianos machacaban el rebote y castigaban las constantes pérdidas de balón de los valencianos. Un triple de Ricci ha puesto un aclarador 40 a 22 para los locales. Aquí se ha producido el único atisbo de reacción. Varias canastas de Davies y un triple de Ojeleye han reducido a diez la distancia, 41 a 31, y un 44 a 31 al descanso.

Si Valencia Basket quería dejar de hacer la goma e ir de verdad a por el partido tenía que demostrarlo de salida en el último acto. ¿Cúal ha sido la puesta en escena? Un parcial en contra de 17 a 2 con un triple del alemán Lo para un 58 a 33. Ni quería ni podía. La búsqueda de soluciones individuales ha sido una trampa que aún ha hecho más dolorosa la herida. Porque los valencianos han seguido tirando triples después de bote, sin pases, con unos porcentajes horrorosos (28’1% en T2 y 29’2% en T3), perdiendo balones, hasta 19, para salir del Mediolanum Forum humillados.

Ahora se puede buscar excusas en la enfermería, donde encuentras a Touré y Jovic, con virus, o a Jones, que hoy ya ha trabajado en Valencia en pista, puede volver el domingo contra Casademont Zaragoza según evolucione en las próximas horas. Pero la realidad es que el equipo ha mostrado los mismos tics que en la 22/23. Sin defensa, se ha descosido mucho de lo que en este buen inicio de temporada se había remendado.