Podemos, contra sus orígenes: de despolitizar la Justicia a proteger su posición en la Moncloa

La hemeroteca le ha vuelto a jugar una mala pasada a Podemos. Su ascenso en política hasta llegar al Congreso se basó en las promesas de cambiar la política española. Uno de las tantos puntos que prometieron en su programa electoral y en sus numerosos mítines fue la despolitización del Tribunal Constitucional y la Justicia.

"Despolitizar el Tribunal Constitucional con un sistema de nombramientos en el que prime el consenso y no las cuotas partidistas, contraproducentes para la garantía de su independencia respecto de los partidos políticos en el ejercicio de su cargo", aseguraba el programa de Podemos, que también destacaba su intención de derogar la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional de 2015. De hecho, la formación morada propuso en 2015 que sean los ciudadanos los que se encarguen de elegir a los miembros de la Justicia española.

[Lea aquí el programa completo de Unidas Podemos].

Sin embargo, ahora que forman parte del Gobierno, han permitido la renovación del organismo con candidatos propuestos por el Partido Popular. Por tanto, el mismo partido que defendía que iba a cambiar la politización de la Justicia, ha pasado a formar parte de este juego, traicionando su propio programa de partido.

Ante las críticas a la postura de Podemos, la formación morada ha justificado su postura que han tenido que ceder por que era la única opción para que finalizase "el secuestro del PP a los órganos constitucionales".

El diputado de Unidas Podemos, Antón Gómez-Reino, ha lamentado que hayan tenido que aceptar los candidatos propuestos por el Partido Popular, ya que son "dirigentes del PP sin carnet vienen tristemente acompañados de la sombra de falta de independencia de la parcialidad".

Incluso Pablo Iglesias, fundador del partido y ex vicepresidente del Gobierno, ha declarado ante los medios de comunicación que era necesario aceptar estos candidatos para favorecer "la normalidad democrática española". Pese a esto, destaca que comparte la sensación de los integrantes de la formación morada de "náusea moral".

¿Por qué este cambio de postura?

Unidas Podemos se excusa en esta vuelta al normal funcionamiento de las instituciones el hecho de haber traicionado una de las principales razones de ser de la formación. Otras formaciones como Vox y Ciudadanos han reprochado la actitud de Podemos. El portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, criticó a Podemos asegurando que "no tienen un pase, nunca se vuelvan a subir aquí a dar lecciones a nadie de limpieza y regeneración".

La explicación a este repentino cambio puede estar en la necesidad de contentar a sus socios de Gobierno, inmersos en la renovación de los órganos constitucionales. En su primera participación en este nombramiento, han "tragado con el sapo" y han tenido que votar a favor incluso de Enrique Arnaldo, el candidato que mayor controversia ha generado. Por tanto, la única justificación a esto se encuentra en el temor de Podemos a que esta oposición a la postura del PSOE sea la gota que colme el vaso y termine con la separación del Gobierno de coalición, algo que perjudicaría gravemente los intereses de Podemos.

Un distanciamiento definitivo entre ambas formaciones puede llevar a un hipotético anticipo de las elecciones generales que perjudicaría a Podemos. Los Presupuestos Generales del Estado y otros asuntos como la derogación de la reforma laboral han hecho que PSOE y Podemos se distancien y una negativa morada que paralice la renovación de los órganos constitucionales podría dinamitar el Gobierno de coalición.

El movimiento del 15M ha sucumbido a las ansias de continuar en el poder de Podemos, ya que desde esta formación son conscientes que pese a sus diferencias con el PSOE, un adelanto de las elecciones podría provocar su salida del Gobierno y una reducción considerable de su poder.