"Se me parte el corazón": Así está afectando el 'síndrome del vinagre' a miles de fotografías históricas
María Jesús, nuera del fotógrafo Juan Miguel Pando, explica en La Linterna qué es lo que está sucediendo y qué supondría esta pérdida para todos nosotros
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Juan Miguel Pando fue uno de los pocos fotógrafos que capturó con su cámara el Madrid de la Guerra Civil y la posguerra. Relató una ciudad derruida, la vida cotidiana, los desfiles, las marchas militares... Sus fotos son tan impactantes que pueden verse en el Museo Reina Sofía o en el Instituto de Patrimonio Cultural de España. En este último, se guardan la mayoría de sus trabajos y las de su hijo Juan, que también es fotógrafo.
Sus obras, principalmente, eran de reportero, pero después de la guerra, cuando fundó su propia agencia, amplió sus trabajados al ámbito industrial y publicitario, lo que le permitió viajar mucho por todas España y Marruecos.
María Jesús, su nuera, cuenta en La Linterna que era un apasionado de las fotos: “Como si hubiera nacido con una cámara en la mano. Era un hombre que sentía la fotografía y la vivía de corazón. Amaba la luz, amaba la espontaneidad, amaba las cosas naturales. No le gustaba nada prepararlo y dejarlo bonito. Prefería la vida como la veía él y cómo la vemos todos”.
Podríamos seguir disfrutando la fotografía de este artista si no fuese porque se están perdiendo algunos negativos. Los 136.000 negativos del Instituto de Patrimonio Cultural podrían estar en riesgo, ya que, desde hace años, la colección sufre el llamado 'síndrome del vinagre': “Los negativos de acetato lo que necesitan son unas medidas ambientales de humedad, temperatura y luz” adecuadas, sin ser excesiva.
Efectos de un proyectil al estallar en la Gran Vía / Juan Miguel Pando Barrero / 1937-1938 (ca.)
La colección se vio expuesta, en 2022, a una humedad con valores en torno al 60%, cuando lo recomendado es un 30 o 40%: “Lo que he llorado por esa noticia, no podría transmitirlo. Ha sido y es muy doloroso. Y no solo por mi suegro, si no por qué hay más archivos ahí, que también están dañados y que me duelen lo mismo, porque es nuestra historia, la historia del mundo, de nuestros antepasados y abuelos”.
Fuera de España tienen más cuidado. La familia Pando ha visitado los archivos nacionales de Washington y Francia y dicen que “están mimados y conservados”, explica María Jesús. “Luego veo lo que nos ha pasado a nosotros y se me parte el corazón. Lo que está pasando es desolador”.
La propia familia tiene guardada en casa más de 300 copias únicas relacionadas con la Guerra Civil, imágenes del Madrid asediado. Fotos que, al no están en el Instituto de Patrimonio Cultural por lo que no están afectadas por el 'síndrome del vinagre'.
Fotografía de portada:
)