Fue el pasado mes de abril cuando se descubrió que frente al puerto de Cádiz se encuentra sumergido un misterioso galeón del siglo XVII. Durante estos meses de verano y, probablemente, hasta final de año será emergido para ser estudiado. No conocemos su nombre, aunque se sabe de su existencia desde el año 2011. Cuenta además con 23 lingotes de plata americana, 27 cañones suecos, 20 metros de eslora y hasta 6 de manga.

Hoy en La Tarde de COPE hemos hablado con Milagros Alzaga, directora delCentro de Arqueología Subacuática, para tratar de conocer todos los detalles, comenzando por el nombre que le han puesto, Delta 1.

¿Para qué servía el galeón?

Aunque no se sepa que tipo de navío es, "en Suecia había una factoría que construía cañones que se distribuían a los distintos reinos que querían comprar, al igual que los comerciantes", comenzaba explicando Milagros a Fernando de Haro. Estos, como era normal, necesitaban elementos de defensa, pues "si se capturaba un barco, se capturaba con todo". Es por ello lo que los cañones pasaban a pertenecer a la nación que capturaba la embarcación, lo que dio lugar a las distintas mezclas.

Su plata es de Oruro y Potosí, ciudades de Bolivia. Y es que las cosas eran distintas en cada lugar. En el caso del primero, "la muestra era de una esquinita", mientras que en el segundo "se tomaba del centro". Todo esto llevó a que una determinada ordenanza real estableciese distintas marcas. Ahora bien, la tripulación iba en función de lo que se realizaba, además de diferenciar entre piratas y corsarios, quienes trabajaban por orden real.

Pero, ¿que ruta hacía? "La habitual salía de Sevilla o Cádiz", aunque más bien por Sanlúcar de Barrameda, desembocando por el Guadalquivir. Podía durar hasta un año.

¿Cuáles son sus condiciones actuales?

Empezando por su nombre actual, Delta 1, tiene que ver con la "antigua planta de crastificación de tanques del mismo nombre donde se encontraba", aclaraba Alzaga. Y, habiéndose movido en su día, al principio estaba a 17-19 metros. Una vez desplazado, "lo tenemos en función de la marea a 6 u 8 metros". Esta situación hace que de momento esté asequible, pero "se ve afectado por la obra de ampliación de la terminal de contenedores del puerto de la Bahía de Cádiz", por lo que se ha decidido "estudiarlo en tierra".

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Algo que aun sigue siendo una incógnita a día de hoy es por qué se hundió tan cerca del puerto, lo que quiere averiguar el equipo de Milagros. Como ella misma dice, "sabemos que es una embarcación de mediados del siglo XVII", por lo que "en función de los datos, buscaremos qué es lo que estaba haciendo en Cádiz, a qué se dedicaba y por qué se hundió", terminaba de explicar la directora del Centro de Arqueología Subacuática en los micrófonos de COPE.