¿Cuál es el origen de la expresión 'hacer buenas migas'?

Muchas son las expresiones en español que hacen referencia a la comida... El parecido con la realidad de algunas como 'salir como un churro', 'yo me lo guiso, yo me lo como', 'darle la vuelta a la tortilla', 'ir a freir espárragos', 'ponerse como un tomate', 'hacer la croqueta' o 'ir pisando huevos' parece más que evidente.

Sin embarog, otras como 'hacer buenas migas', expresión con la que nos referimos a llevarnos bien con alguien, guarda un vínculo más peregrino. Pero ¿cuál es el significado y de dónde viene esta expresión tan comodín y popular en nuestro día a día?

Las migas son un plato tradicional originario de los pastores trashumantes que se consume en diferentes lugares de nuestra geografía. Castilla La Mancha, Andalucía, Murcia, Castilla y León, Extremadura o Aragón, son algunos de ellos.

Esta elaboración era la forma que tenían para aprovechar ese pan que se les iba poniendo duro en sus largos y fríos días de trashumancia. Bastaba con desmigarlo y mezclarlo con diversos ingredientes, alguna grasa -que podía ser aceite de oliva o manteca de cerdo y sebo-, ajos, agua, pimientos y el embutido que sí que se mantenía en perfecto estado durante todo su periplo.

Para cocinar este plato tan contundente se solían juntar varios pastores y hete aquí el origen de la expresión. Seguro que las migas que elaboraban estaban deliciosas, pero realmente la expresión 'hacer buenas migas’ se refiere a ese momento de armonía y camaradería coral que vivían entre ellos, ya que cada cual contribuía con algún ingrediente; el pan, el tocino o la bota de vino. Además la labor de desmigar el pan podía resultar pesada con que sumar manos al cometido, era un plus.

Esa forma de meter todos la cuchara, entonces de madera y de beber por la misma bota, era también una manera de confraternizar, de tratar de estar en familia pese a las largas estancias fuera de casa, y en definitiva, era la posibilidad de hacer buenas migas entre ellos.

RECETA DE LAS MIGAS

Si leyendo esto, te has quedado con las ganas de preparlas, aquí te dejamos una receta:

200 gramos de chorizo

100 gramos de panceta

1 barra de pan del día anterior

4 dientes de ajos

Para comenzar debemos cortar la barra de pan en trozos, y humedecerlos en agua con sal, no hace falta que se empapen. Después, en una sartén con aceite se fríen los ajos enteros, a continuación el chorizo y la panceta cortados en dados.

Por último, añadimos las migas y las rehogamos media hora a fuego lento para que se integren bien todos los ingredientes y se mezclen los sabores.

Las migas se pueden acompañar coronadas con un huevo, ya sea escalfado o frito.