diabetes
"Diabetes en Cantabria: recursos insuficientes y demandas urgentes en su Día Mundial"
La Asociación Cántabra de Diabetes denuncia carencias graves en el acceso a dispositivos de control, bombas de insulina y medicamentos esenciales para pacientes con diabetes en Cantabria
Santander - Publicado el
3 min lectura
En Cantabria, alrededor de 65,000 personas viven con diabetes, una enfermedad crónica que requiere cuidados constantes y que afecta a un 14% de la población. Sin embargo, el acceso a recursos avanzados y dispositivos médicos sigue siendo limitado, lo que expone a los pacientes a graves riesgos y dificultades en el manejo diario de su enfermedad. Coincidiendo con el Día Mundial de la Diabetes, la Asociación Cántabra de Diabetes ha lanzado un mensaje claro y urgente: se necesitan más apoyos y recursos institucionales para mejorar la atención y calidad de vida de las personas con diabetes en la región.
Existen diferentes tipos de diabetes, entre ellas, la diabetes tipo 1 y tipo 2, que requieren monitoreo constante de los niveles de glucosa para evitar complicaciones graves a largo plazo. Sin embargo, en Cantabria los pacientes tienen serias dificultades para acceder a los dispositivos necesarios, como los sensores de glucosa de monitoreo continuo y las bombas de insulina. Según Aureliano Ruiz, presidente de la Asociación, “en Cantabria, menos de una cuarta parte de los niños cuenta con una bomba de insulina financiada por el sistema de salud, una tecnología vital que mejora radicalmente el día a día de los pacientes y ayuda a evitar descompensaciones peligrosas”. Una bomba cuyo coste ronda los 237 euros.
Para los pacientes con diabetes tipo 2, que también pueden beneficiarse de estos dispositivos, la situación es aún más complicada. Estos dispositivos, explica la Asociación, permiten un mejor control y prevención de complicaciones futuras como daños renales, ceguera y problemas circulatorios. Ruiz insiste en que los sensores de glucosa y las bombas de insulina no son “lujos”, sino herramientas fundamentales para garantizar el bienestar y la calidad de vida de los pacientes.
Medicamentos de emergencia inaccesibles: el baqsimi nasal
Otro recurso esencial que sigue siendo inaccesible en Cantabria es el Baqsimi nasal, un medicamento crucial para tratar emergencias de hipoglucemia grave. Este medicamento puede administrarse en situaciones donde una persona con diabetes ha perdido la conciencia o está a punto de hacerlo debido a un nivel muy bajo de azúcar en sangre. Sin embargo, su elevado precio —aproximadamente 120 euros sin receta— hace que muchas familias no puedan permitírselo, dejando a los pacientes desprotegidos en situaciones de emergencia.
Ruiz denuncia que este medicamento, de fácil administración, debería estar cubierto por el sistema de salud, especialmente porque su uso es sencillo y no requiere refrigeración, lo que permite llevarlo en la mochila o tenerlo en el colegio. “El baqsimi nasal puede marcar la diferencia en la respuesta rápida ante una hipoglucemia grave. Asegurarse de que las familias y los centros escolares tengan acceso a este medicamento debería ser una prioridad”, afirma.
necesidad de mas educacion
Además de los dispositivos y los medicamentos, la Asociación hace hincapié en la importancia de una educación continua para los pacientes. En palabras de Ruiz, "la diabetes es una condición que necesita conocimientos específicos y educación constante". La Asociación Cántabra de Diabetes destaca la importancia de ofrecer formación especializada a los pacientes, especialmente a los niños, quienes requieren aprender a manejar su enfermedad desde edades tempranas para poder prevenir riesgos y complicaciones a lo largo de su vida.
Con motivo del Día Mundial de la Diabetes, la Asociación ha pedido a las autoridades de Cantabria una mayor sensibilidad y acción para garantizar que las personas con diabetes puedan tener acceso a la tecnología y los medicamentos necesarios para su control diario. La falta de dispositivos adecuados y el acceso limitado a medicamentos esenciales no solo compromete la calidad de vida de los pacientes, sino que también puede aumentar los costos a largo plazo en términos de complicaciones y hospitalizaciones evitables.
En palabras de Ruiz, “la diabetes y el bienestar están estrechamente vinculados. Necesitamos que se actúe ya, no podemos esperar más en Cantabria para tener acceso a estos recursos básicos”.