Peñíscola habilita 1.800 plazas de aparcamiento gratuito este verano

Con el resplandor del verano en pleno apogeo, la encantadora localidad de Peñíscola recibe como cada año numerosos visitantes (alrededor de 1,2 millones) ansiosos por disfrutar. Conscientes del aumento exponencial del tráfico y la necesidad de estacionamiento, el Ayuntamiento de Peñíscola ha desplegado un plan estratégico para habilitar 1800 nuevas plazas de aparcamiento gratuito, distribuidas en diversos puntos del municipio.

El área de Urbanismo, el área de Gobernación y Policía Local, junto a la Brigada de Obras y Servicios, han trabajado incansablemente para acondicionar siete solares destinados a estos nuevos espacios de estacionamiento. Los puntos habilitados son:

Calle Teruel con Camino Abellers: Dos solares con capacidad para 400 plazas.

Avenida Pigmalión: Tres solares con capacidad para 350 plazas.

Calle Castellón: Dos solares con capacidad para 150 plazas.

Calle Proyecto 19: Un solar con capacidad para 400 plazas.

Zona colindante al complejo polideportivo: Un solar con capacidad para 500 plazas.

Estas nuevas plazas, esparcidas a lo largo del núcleo urbano, suburbano y en la extensión turística de Peñismar, facilitan el acceso a los numerosos encantos de la ciudad. Este verano, los visitantes podrán dejar sus vehículos sin preocupaciones y explorar a pie las maravillas de Peñíscola.

Un verano de ensueño en Peñíscola

Además del mar y las playas doradas, Peñíscola ofrece una vasta gama de actividades y lugares de interés que harán que los turistas se enamoren de cada rincón. La ciudad es conocida por su histórico castillo templario, el Castillo de Peñíscola, que se alza majestuosamente sobre el mar. Construido por los templarios en el siglo XIII y posteriormente residencia del Papa Luna, este castillo invita a los visitantes a un viaje en el tiempo con sus imponentes muros y vistas panorámicas.

Los amantes de la naturaleza pueden disfrutar del Parque Natural de la Sierra de Irta, un paraíso de rutas de senderismo que serpentean a través de paisajes mediterráneos vírgenes, acantilados abruptos y calas escondidas. Para aquellos que prefieren un paseo más relajado, el Paseo Marítimo ofrece vistas impresionantes del litoral y es ideal para un paseo al atardecer.

El casco antiguo de Peñíscola, con sus callejuelas empedradas y casas blancas adornadas con flores, es perfecto para perderse y descubrir tiendas de artesanía local y restaurantes que sirven delicias gastronómicas. No se puede dejar de probar los platos típicos como la paella o los suquet de peix, que reflejan la rica tradición culinaria de la región.

Para los más pequeños y jóvenes de corazón, el Jardín del Papagayo ofrece una experiencia divertida y educativa, con una variedad de aves exóticas y espectáculos interactivos. Y para una experiencia cultural única, el Museo del Mar permite a los visitantes sumergirse en la historia marítima de la localidad.

Con estas nuevas facilidades de aparcamiento y una gama tan diversa de actividades y lugares por descubrir, Peñíscola se consolida como un destino veraniego ideal. Este verano, deja que el encanto de esta joya costera te envuelva y vive una temporada llena de magia y descubrimientos.