Cometas para propulsar buques: "En Galicia hay un estudio experimental"

Ya existen barcos que usan energía eólica mediante el funcionamiento de una cometa que arrastra un cable conectado a un dispositivo que genera electricidad en ciclos de ascenso y descenso. Así se pueden aprovechar recursos eólicos.

Nos lo cuenta el ingeniero naval Raúl Villa y secretario de Exponav.

Hace meses contábamos en Herrera en Cope Galicia que, en aras de la búsqueda de la descarbonización en el transporte marítimo, ya existían barcos mercantes (unos 30 en el mundo) impulsados por velas rígidas, con un funcionamiento similar a las velas de un avión. Además, algunas de estas velas metálicas se están fabricando en Galicia, en una planta de piezas eólicas de As Somozas.

Pero los avances continúan, y hoy en día aparecen buques mercantes también impulsados por cometas. Aunque eso sí, propulsan al barco solo parcialmente, es decir, se siguen necesitando los combustibles tradicionales para que las naves puedan navegar.

En la actualidad, el incremento de actividades deportivas que emplean este tipo de dispositivos ha disparado el uso de las cometas como tracción marítima.

¿Realidad o ficción?

Para llegar a esa realidad, que todavía se encuentra en fase experimental, habrá que superar una serie de barreras, que se concentran principalmente en la necesidad de que se establezca una normativa al respecto.

Hoy en día estas cometas, en la regulación del espacio aéreo para este tipo de equipos, son tratados como drones (aunque en el caso se los barcos vayan unidos por un cable) lo que pone muchas trabas a su posible uso como fuente de energía.

¿Cómo funcionan estos dispositivos? Villa explica: "Pues de una manera muy simple: una cometa arrastra un cable conectado a un dispositivo en el buque generando electricidad en ciclos de ascenso y descenso, que pueden ser aprovechados para la propulsión del buque".

Si un barco pudiera llegar a lanzar siete u ocho cometas de manera simultánea, podría llegar a generar la misma electricidad que un aerogenerador convencional. Pero la realidad es que hoy en día estos sistemas, en vez de megavatios, solo generan kilovatios, por lo que aún están lejos de ser una ayuda real para la propulsión del buque.

El aprovechamiento de la energía eólica mediante cometas, también se puede efectuar en tierra firme. En los últimos años, han aparecido aeronaves dotadas de dispositivos captadores de energía eólica volando en zonas con viento cruzado. Estos artefactos, según sus siglas en inglés, se denominan “AWES (Airborne Wind Energy Systems)”.

LOS AVANCES EN ESPAÑA Y GALICIA

La Universidad Carlos III y la empresa CT Ingenieros han creado el primer laboratorio español para investigar estas energías, y desarrollar la primera máquina AWE de tipo “yo-yo (movimientos en ocho)” en nuestro país. 

Este banco de pruebas está dotado con una cometa capaz de generar una potencia de aproximadamente 10 kilovatios. 

Se trata de una generación humilde, pero que ha abierto el camino para que en Galicia algunas empresas españolas se hayan interesado en estos proyectos y ya existe un estudio para probar un sistema de cometas en la mar, en el parque experimental de Punta Langosteira (A Coruña).

El experto naval Villa concluye: "Para que todos estos nuevos dispositivos demuestren sus bondades, será necesario disponer de prototipos que proporcionen datos reales sobre su funcionamiento y ahorros, tanto en buques como en tierra. Para las instalaciones en tierra se podrían diseñar comunidades energéticas en entornos rurales, sumando a los AWES, la energía solar u otras energías renovables".