Ciberdelitos, el más ruinoso y el más grave en Euskadi

Uno de cada cuatro delitos cometidos en Euskadi tiene un componente informático. Los ciberdelitos han crecido de forma exponencial en nuestra comunidad, se perpetran 70 cada día. Uno de los más recientes, el ciberataque esta semana al Parlamento Vasco y a otras cámaras autonómicas, que tuvieron que bloquear durante unas horas sus web, por parte de 'hackers' rusos que buscan perjudicar a los países aliados de Ucrania.

Es el "ransomware", el secuestro de información, encriptación de datos y una posterior extorsión, el delito online más frecuente entre las empresas, como explica a COPE Euskadi Juan Arce, experto informático en ciberdelitos y socio de la empresa vitoriana Guzcor Consultores, quien considera que el caso público -porque no todos no se reconocen- más grave acaecido en Euskadi fue el de Euskaltel, "cuando se filtraron los datos de sus clientes".

Y desvela que el mayor botín recaudado por un ciberdelito vasco supera los 300.000 euros. Este forense informático no revela por confidencialidad a qué empresa afectó, pero la cifra supera los 200.000 euros reconocidos por la Ertzaintza. Aunque aún lejos de los rumores que apuntan al "millón" de euros birlados.

Reconocimiento previo de las víctimas

Juan trabaja en distintos casos y señala que es primordial saber recoger este tipo de pruebas. "Es tan importante con estas pruebas saber recogerlas como entregarlas porque muchas veces se borran o se pierden por desconocimiento", advierte al tiempo que asegura que para esta tarea la Ertzaintza necesita más formación.

El experto también destripa cuáles son las ciberestafas más habituales entre la ciudadanía, esas en las que los autores juegan con supuestas brechas de seguridad en nuestras cuentas bancarias u ordenador y con la premura para subsanarlas, así como las que suplantan a nuestra compañía de suministro o a nuestra entidad financiera, y cada vez de forma más sofisticada, haciendo incluso que aparezca el teléfono del banco en nuestra pantalla.

Los autores de estas ciberestafas tienen más datos de las víctimas de lo que creemos. Hacen el llamado "reconocimiento previo", alerta Juan, quien ofrece una serie de consejos que puedes escuchar pinchando aquí.