Herrera: "Roures es independentista, trotskista y millonario. No son incompatibles unas cosas con otras"

Señoras, señores, me alegro, buenos días:

Bienvenidos a este excitante jueves 15 de febrero de 2018, y digo lo de excitante no porque me pase el día yo en el taller de Torremolinos financiado con dinero público que monta con la organización del ayuntamiento del PSOE unos cursos para la masturbación masculina y el “autocoñocimiento” de las mujeres, lo cual es una cosa muy entretenida ciertamente; con estas cosas de “tú dame cremita y yo te doy”, etcétera, etcétera. A mí me parece muy bien que se den cremita en toda la plazoleta de lo que quieras, pero anda, que se paguen la cremita ellos, ¿no? No se la tenemos que pagar los demás. Pues ahí está la Junta poniendo el dinerito.

Bueno, pero le digo que es excitante porque, bueno, la información hoy es muy interesante. La información hoy tiene algo también de recurrente, o si quieren ustedes de melancólica por el bucle. Mire, fíjense, yo podría rescatar ahora mismo la información que las di del último suceso que ocurrió, como el que ha ocurrido, ocurrió ayer en Florida, y verían ustedes que es exactamente lo mismo, la misma crónica. Son las mismas consideraciones, es la misma sorpresa, aturdimiento. La madrugada nos ha dejado una matanza brutal en Estados Unidos. Otra vez un colegio, otra vez un tío, otra vez con un arma que se compró abiertamente, tiene diecinueve años, en una tienda, un fusil semiautomático. Y otra vez quince, diecisiete muertos, muchos heridos, con la diferencia final de que en esta ocasión él no se ha pegado un tiro, quería huir y la policía lo ha detenido. Un tal Nicolás Cruz. Un joven de diecinueve expulsado del centro porque tenía ya un historial. Claro, esto, en fin, nos coge aquí lejos y lo ve, pero qué debate abre en una sociedad cuando ocurre esto así por enésima vez, por enésima vez y además con los mismos resultados, ¿no? Una sensación de perplejidad. ¿No podemos hacer nada? ¿No podemos bloquear el acceso a las armas de estos tipos? ¿Es fácil conseguir un arma? Pues hombre, es fácil si usted, en el submundo por ejemplo. Aquí en España se busca el contacto necesario y se hace con una de extranjis y paga una pasta. Legalmente no la puede conseguir a no ser que tenga usted licencia de armas, etcétera, etcétera. En Estados Unido sí, y además la Constitución lo avala, lo protege porque es el derecho a defenderse que tiene la gente, y la gente va, compra un rifle, y luego va al colegio y pega tiros. ¿Podía haber conseguido el rifle de otra manera? A lo mejor sí, a lo mejor sí. Pero claro, dicen los abolicionistas de esa norma que al menos se les ponga algo más difícil, ¿no?

Bueno, en España. En España hoy la cosa está, tiene un nombre propio el día, que es el de Jaume Roures, al que ahora le dedicaremos alguna pesada. Este personaje, este empresario de medios de comunicación de… Este empresario audiovisual, del mercado audiovisual... Se dice independentista, trotskista y millonario. Bueno, no es incompatible una cosa y la otra. Él quiere ser millonario precisamente para difundir sus ideas trotskistas. Lo ha hecho cuando el Gobierno de Zapatero le concedió “la Sexta” televisión, y cuando abrió el diario “Público”. Además luego, con una maniobra un tanto… Es decir, “Público” se va al garete y entonces él espera a comprar, a recomprar la cabecera cuando entra en concurso, y deja tirados a los trabajadores que quedaban. Le tienen mucho cariño los trabajadores de “Público”, del “Público” anterior a Jaume Roures.

Jauma Roures es el dueño del fútbol en España, Mediapro, nadie, a nadie se le oculta que es una pieza más del entramado del golpe de Estado independentista. A nadie se le escapa. Eso hay que evidenciarlo bien, hay un informe de la Guardia Civil que ha enviado al Supremo en el que dice que forma parte del comité ejecutivo de ese proceso. El informe, hombre, evidencias, evidencias más que otra cosa, lo que le citan en algunas conversaciones tipos como José María Jové, etcétera, etcétera, que le implican en… Pero bueno, me da a mí que el peso de ese informe no es un pese definitivo, me da a mí, ¡eh!, por lo que veo… Pero vamos, ¿que es el perejil de todas las salsas? Indudablemente.

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De ese proceso lo que queda hoy es la declaración ante el juez de una diputada de la CUP, muy premiada, que se llama Mireia Boya. Esta Mireia Boya es la única que ha dicho ante el juez lo que todos sabemos que es verdad: que la declaración unilateral de independencia iba en serio. Todos los demás, y en fin, cada uno tiene su estrategia de defensa, pero todos los demás han dicho que “no, no, miren, era broma”; “no, miren, eran intenciones”; “no, era poesía”; “no, era reivindicación”; “no, era libertad de expresión”. No, no, esta ha llegado y ha dicho: “¡No, no, qué coño”! De eso nada, tenía efectividad real. No era una acto simbólico la declaración unilateral de independencia. Con lo cual les ha hecho un favor a los que están en la cárcel, ¡bua!, o a los que pueden entrar en la cárcel que para qué te cuento. Tienen que estar que trinan con ella. Pero es que estos, estos tíos y tías ultrarradicales son así, a derribar el tablero. Nosotros vamos a por las bravas, a lo que sea. Ya se cargaron a Artur Mas, acuérdense. Pusieron a este fantoche de Puigdemont. Y ahora les da igual que se carguen a los demás. Bueno, esta declaración de la señora Boya, usted dirá, se autoinculpa ella misma. No, no. Ella está protegida porque ella no está en ningún… Ella no firmó nada. Ella no estaba en los planes de ejecución. Ella era figurante como todos los demás de la CUP. Bueno, ha dicho la verdad. La verdad para vergüenza de pusilánimes, por cierto.

No, somos un movimiento pacífico. ¿Un movimiento pacífico con tíos en la puerta del Supremo dando vivas a Terra Lliure? Eso es Terra Lliure, ¡eh!, que mató gente. ¿Eso es un movimiento pacífico? Por otra parte siguen las divisiones entre Juntos por Cataluña y Esquerra Republicana, y ahí como venimos diciendo estos días, pues a esperar a que se despellejen.

Y luego la parálisis política de España, que hoy es uno de los argumentos informativos más importantes, más interesantes. ¿A cuenta de qué? Pues mira, a cuenta de que es un Gobierno en minoría, que tiene un apoyo en legislatura de un partido como Ciudadanos, pero que necesita según para según qué cosas más votos. Pues los del PNV. Y el PNV hace como cuando todo buen nacionalista es necesitado o requerido para algo: poner un precio bien alto. Antes, cuando un partido, por ejemplo, Jordi Pujol a Felipe González cuando en el 96 le dice que no le apoya los presupuestos. Un gobierno sin presupuestos convoca elecciones. Las convocó Felipe. Ahora, dice este Gobierno, es otra forma de gobernar. Yo puedo mientras tenga el techo de gasto, y mientras tenga las instituciones europeas, un pacto con ellos para combatir el déficit, yo puedo trocear el presupuesto y puedo gobernar por real decreto. Hombre desde luego no es el escenario ideal. Pero es que los dos principales partidos, que aún así no son suficientes, habría que recordarlo, PP y Ciudadanos, principales partidos que apoyan, o sea que, están con el apoyo al Gobierno. Estos dos partidos andan a la gresca ahora mismo. ¿Quizás un poco sobreactuado? Sí. Pero están condenados a entenderse, les guste o no les guste. ¿Y es el escenario ideal gobernar por real decreto? Indudablemente no. Desde luego la legislación no lo prohíbe, pero no es el escenario ideal. España necesita impulso para el crecimiento. Necesita organizar bien las bases económicas para que el crecimiento del PIB continúe. Y para eso hace falta entendimiento político. Altura, un poquito de altura de miras en el trato.