Este es el motivo por el que la nueva selectividad será más difícil que la EBAU: el fallo que sí penalizará

La conocida actualmente como la EBAU (Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad) ya ha concluido en nuestro país, al menos la primera convocatoria. No obstante, ya hay planes para el próximo curso y, tras haberla llamado 'selectividad', pasando por EvAU o AvAU, ahora pasará a ser la PAU (Prueba de Acceso a la Universidad) y tendrá un modelo de formato de examen muy diferente del que se conoce hasta ahora.

Al menos así lo han explicado este jueves el director de La Linterna, Ángel Expósito, y su compañero Jon Uriarte, con el que desgranaba en la sección del programa 'He visto Luz' todos los detalles del anuncio de la nueva prueba, de la que aseguran que será más complicada que la que acaba de finalizar este 2024. Pero a los comunicadores les asaltan varias preguntas: ¿Antes era más complicada? ¿Ahora está “chupadito”? ¿Por qué dicen que va a ser más dura? “Para ello tengo a Jon Uriarte que, si tuviera que examinarse de primaria, no aprobaría ni una”, bromeaba el director del programa al dar paso al periodista vasco.

Las diferencias entre EBAU y PAU

Explicaban ambos comunicadores que, hasta ahora, en el examen de acceso a la universidad suspendían muy pocos alumnos, al menos en la modalidad de la EBAU, “pero siempre hay alguien que se pone nervioso, y menos mal que no hay exámenes orales”, comentaba Expósito. Pero, respecto a la nueva prueba que preparan para 2025, asegura Educación que será “menos memorística”, y que habrá que “deducir las respuestas y recitar menos de memoria”. “Me temo lo peor”, comenta Uriarte.

“Antes se pillaba al que no había estudiado, ahora le bastará con dar una respuesta graciosilla”, ironiza el director del programa de COPE. Y es que, en la nueva EBAU, que se llamará PAU, no podrán elegir las preguntas. De esa manera, si eligen un temario tienen que respetarlo entero.

El fallo que ahora sí penalizará

Otra novedad de la nueva prueba para la universidad será que el 30% del examen nuevo contendrá preguntas de respuesta cerrada, tipo test. Pero, además, hay un detalle que penalizará hasta un punto de la nota final, mientras que ahora ni siquiera cuenta. “Como haya faltas de ortografía pueden bajarte un 10% la nota, mientras que ahora, en algunas comunidades los alumnos podían tener hasta 25 fallos y sólo te quitaban un 0,25 de la nota final”, explica Uriarte en La Linterna.

Otro punto que introducirán en la nueva modalidad de prueba es que los alumnos podrán utilizar calculadoras, tablas o diccionarios, “porque dicen que, de esa manera, dedicas el cerebro a buscar soluciones, y no a resolver cuentas”, comenta el periodista vasco a Expósito. Por último, explica que cada examen tendrá una duración máxima de 90 minutos, “ni uno más ni uno menos”.