La anécdota que ha compartido Carlos III una vez que su madre ha muerto que evidencia la relación que tenían entre ellos

A lo largo de la historia han sido numerosas las ocasiones en las que de una manera o de otra, ha cambiado la administración y división política del mundo. Y algunos países europeos, aunque son los más antiguos, también han sufrido cambios hasta ser como son ahora, especialmente después de los procesos de independencia de las colonias.

Y es que, son muchos los países que, aunque no hayan modificado su territorio, sí que lo han hecho es su forma de estado. Todos sabemos que nuestro país, España, es una monarquía parlamentaria desde que en 1978 se aprobó nuestra actual Constitución. Países como Francia, que tradicionalmente fueron monárquicos, desde la Revolución Francesa es una república, pero hay otros como el Reino Unido que tienen una situación especial en este tema.

Reino Unido es el nombre que recibe este país, formado por 4 reinos: Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte. Además, llama la atención que según por ejemplo, en algunas competiciones deportivas, como los Juegos Olímpicos, juegan como Reino Unido, mientras que en otras, como la Eurocopa, lo hacen por reinos separados.

Inglaterra

Este es el reino más grande e importante de todos, donde se encuentra una de las ciudades más grandes de Europa, capital del reino y del Estado, Londres. Además, en esta ciudad también se encuentra la residencia de una de las casas reales más antiguas del mundo, esa monarquía inglesa que tanto da siempre de que hablar, tanto allí, como de manera internacional.

Y es que si hay una característica con la que los ingleses definen a su casa real es con el secretismo, que en numerosas ocasiones ocupa portadas en los medios de comunicación. Aunque, de vez en cuando, es muy sonado cuando alguno de los miembros de esta realeza revela alguno de estos secretos.

La anécdota de Carlos III

Hace ya tiempo que falleció Isabel II, madre de Carlos, con uno de los funerales más seguidos mediáticamente del mundo. Pero la anécdota tiene que ver con la coronación de Isabel, que fue en 1953, cuando tanto el actual rey como su hermana eran pequeños. Y Carlos ha dicho, que mientras les bañaba, practicaba con la corona porque aunque ya era reina, todavía no había sido su coronación. Y es que practicaba porque se trata de una corona que pesa mucho.

Eva Millán, corresponsal de COPE en Londres, ha confirmado a Pilar García Muñiz en La Tarde que esta corona pesa más de 2 kilos, concretamente, 2,2 kilos. Además, Eva aclara que “la corona que llevan habitualmente los monarcas británicos en las grandes ocasiones de Estado, como por ejemplo la apertura del parlamento o la propia salida de la abadía de Westminster después de la coronación, pesa la mitad”.

Esta corona tiene el nombre de corona de San Eduardo, tiene unos 300 años de historia y la utilizó por primera vez el Rey Carlos II en 1661. Y como no podía ser de otra manera, esta corona se encuentra altamente custodiada y guardada en la Torre de Londres.

Pero la anécdota de Carlos, tiene un trasfondo que han desgranado los medios británicos, y es que lo que quiere decir, es que, no era precisamente Isabel quien se mojaba las manos bañándoles mientras se probaba la corona, sino que mientras eran bañados por el servicio, ella practicaba, lo que quiere decir que era una madre distante, alejada de sus hijos, y centrada en la realeza.