La madrugada del sábado al domingo cambia la hora: a las 2 de la madrugada, serán las 3

La madrugada del sábado al domingo cambia la hora. A las dos de la mañana, el reloj deberá marcar las tres. Es el cambio horario que nos roba una hora de sueño. El confinamiento puede convertirse en una oportunidad para adaptarnos mejor a este cambio horario que además nos brindará una hora más de luz por la tarde.

En 2018, la Comisión Europea anunció que iba a proponer la eliminación del cambio de hora, tras los resultados de la consulta pública realizada entre la población de los estados miembros sobre este tema, que mayoritariamente pedía que no se cambiara la hora en los relojes europeos dos veces al año. La mayoría de las personas tardan 3 semanas en acostumbrarse a este cambio horario, según los expertos. Especialistas de diferentes disciplinas apoyan la idea de que los cambios de hora producen más perjuicios que beneficios.

 El Jefe del Departamento de Psicología de la Universidad CEU San Pablo, Pedro Luis Nieto del Rincón, considera que en este tiempo de confinamiento “quizá nos tengamos que alegrar de que la burocracia europea sea tan lenta, porque en esta ocasión puede que nos venga bien realizar este cambio”.

Que pille en casa a toda la familia nos permitirá asumir el cambio de forma progresiva, debido a los horarios algo más flexibles, nos dice el profesor que “antes nos veíamos obligados a adaptarnos de un domingo para un lunes. En esta ocasión vamos a poder ir incorporando el nuevo horario poco a poco en nuestra rutina diaria”. A esta circuntancia se une el hecho de que el cambio de hora nos va a proporcionar más tiempo de luz durante la tarde, lo que puede mejorar nuestro estado de ánimo porque “ si permitimos que el sol entre en la casa aumentará nuestra síntesis de vitamina D. Se ha observado que la carencia de esta vitamina está relacionada con deficiencias en el sistema inmunológico, depresión y otros problemas psicológicos”.

Además, insiste el profesor “el reloj biológico del cerebro está regulado por la luz solar, por lo que esta hora adicional de sol por la tarde, va a disparar una cadena de respuesta de adaptación fisiológica y de aumento de defensas inmunológicas”. Pero tenemos que hacer bien este cambio. Nieto del Rincón nos recomienda dormir el número de horas suficiente, adaptar nuestras rutinas y revisar nuestras actividades diarias, hacer algo de ejercicio y aprovechar este cambo de hora “para tomar más el sol, dentro de lo posible. Es muy agradable ahora estar en la ventana aprovechando el extraño y encantador silencio de nuestras calles”. Y con buen ánimo, que nos queda una hora menos.