El testimonio de un Guardia Civil, tras rescatar a una mujer en el río Pisuerga (Valladolid): “Esquivando las ramas pudimos llegar”

Agarrada a una rama, en una zona oculta y escarpada, medio sumergida en las frías aguas del río Pisuerga, a 12 grados, así ha permanecido durante horas una mujer de 74 años a la que se le perdió la pista en la mañana de este miércoles. No ha sido hasta las nueve de la noche de ese mismo día cuando sus gritos de socorro alertaban a los vecinos de una urbanización de Arroyo de la Encomienda. La mujer presentaba ya evidentes síntomas de desorientación. Con un dispositivo de búsqueda ya en marcha, los primeros en llegar fueron dos agentes de la Guardia Civil. 

Carlos Barrios, es Cabo en el cuartel de Zaratán nos cuenta en COPE que el acceso fue muy complicado por la vegetación, por la pendiente, de noche...y con la luz de las linternas desde la otra orilla.

“Más o menos con el haz luminoso de la otra orilla, nosotros conseguíamos ir bajando como podíamos gracias al compañero que con la preparación que llevan estos grupos. Llevan como unas navajas, unos guantes anticortes pues de rodillas esquivando las ramas las cartas pudimos llegar hasta ella”, nos cuenta en Herrera en COPE.

Cuando lograron alcanzarla, ya la notaron temblorosa, sin fuerza. Llevaba horas sumergida de cintura para abajo en unas aguas que bajaban con fuerza. El tono de voz cada vez era más débil. Carlos no se lo pensó a pesar de que temió por su vida.

“Aunque en tu vida te la puedas jugar porque hubo momentos había pozas y había una zona descarga de agua que notábamos que nos íbamos para abajo y de hecho un bombero en una de esas me tuvo que agarrar y sacarme a mí para arriba porque veía que me iba pero bueno al final salió bien”, explicaba Barrios.

Los bomberos de la Diputación participaron en un rescate muy complicado por las condiciones del río y por la zona donde la mujer quedó atrapada durante horas.

“Cada palo que tenías que ir cortando pues tardabas un minuto más. Nosotros desde que vimos a la mujer en el río para avanzar a lo mejor cinco metros tardábamos 10 minutos entonces ves que ya empieza a fallar las manos y que se iba corriendo abajo”, explica.