Expósito señala "el mejor anuncio" de televisión de la historia de España y que popularizó una empresa de Granollers

La historia de la televisión en España ya es algo longeva, porque aunque hace ya más de 60 años que comenzaron las emisiones de televisión regulares en España, esta es suficiente edad como para que todos la tengamos presente, especialmente los más adultos y mayores que recordarán también cuando la imagen era en blanco y negro y cuando pasaron a ser a color.

Y si hay algo que siempre ha ido completamente unido a la historia de la televisión, además de la información, es el entretenimiento, y, por supuesto, la publicidad. Aquellos míticos anuncios que en algunas ocasiones hoy en día no serían ni siquiera aptos para emitirse entre los que había productos de limpieza, electrodomésticos, supermercados y alimentación, e incluso tabaco.

Busque y compare

Y es que precisamente son muchos de aquellos anuncios de televisión los que podemos considerar míticos. Porque eso es lo que han hecho Ángel Expósito y Jon Uriarte, que han decidido quedarse con ese famoso “Busque, compare, y si encuentra algo mejor, cómprelo”, que anunciaba al que todavía se vende, detergente Colón.

La empresa CAMP, que en aquellos momentos se encontraba en una situación difícil decidió hacer este anuncio que no tardó en convertirse en uno de los más populares de la televisión en España. Uno de los posibles motivos sería que el actor que anunciaba el producto era Manuel Luque, que en realidad no se trataba de ningún actor, sino del propio director general de la compañía.

Y es que esta era ni más ni menos que la primera vez de el director de una compañía se ponía como cara visible en un anuncio de televisión. Esto desembocó en una reacción del público que relanzó la popularidad de la empresa, que llegó a salvarla de la quiebra.

Nueva publicidad

Anteriormente a este anuncio, la publicidad de los detergentes en televisión en España siempre presentaba un panorama dramático que solía estar protagonizado por una mujer y una vecina. Nunca se había planteado esta opción en España, que en cambio en América sí que era popular, un hombre arreglado, en traje, anunciando un producto completamente doméstico y que nunca se habría asociado a él.

Y el resultado fue una inspiración hasta para los carteles políticos en nuestro país. Pero en este caso, el anuncio quería transmitir rigor y seriedad, afirmando que este era el mejor detergente que se podía comprar en el mercado, incluso desafiando a que quien encontrara algo mejor, que lo comprara sin ningún tipo de problema.