"Es lo que tiene la Justicia, que los procedimientos deben ser los mismos para un albañil o para la mujer del presidente del Gobierno"

Yo no sé como acabará el periplo judicial de Begoña Gómez, pero la estrategia judicial que están siguiendo en Moncloa está recibiendo un varapalo judicial tras otro. 

No tiene otro calificativo la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Madrid en la que, por unanimidad, rechaza la querella de Pedro Sánchez contra el Juez Peinado por prevaricación.

Con este movimiento, el presidente pretendía dar carpetazo a la investigación sobre su mujer acusada de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. No lo ha conseguido y el tribunal le deja claro que la querella tiene “carácter especulativo”.

No solo eso, sino que deja muy mal a la Abogacía del Estado y todas las maniobras que Moncloa ha seguido para intentar desactivar la instrucción del caso Begoña Gómez.

Según el Tribunal, el juez Peinado no quiso interrogar a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, sino como esposo de Begoña Gómez. Por eso, los jueces critican la intervención de la Abogacía del Estado presentando la querella y lo califican de “extravagante”.

Esa estrategia de Sánchez se centraba en poner en duda la decisión de Peinado de citar al presidente del Gobierno y grabar su declaración como testigo pero el tribunal también recuerda que grabar una declaración de testigos es habitual, y que pasar esa grabación a las partes, también lo es.

Es lo que tiene que la justicia sea igual para todos: que los procedimientos deben ser los mismos para un albañil, un periodista, o para la mujer del presidente del Gobierno.

Que el tribunal se vea obligado a recordar este punto de manual, no deja demasiado bien a la Abogacía del Estado, que presentó la querella, ni al abogado del matrimonio Sánchez Gómez, que es el exministro socialista Antonio Camacho.

Todo esto es un extracto de los 38 folios que concluyen en achacar a Sánchez “un intento de tergiversar el delito de Prevaricación” para desactivar la causa contra su mujer.

En Moncloa no ganan para disgustos esta semana; el caso “Koldo/Ábalos”, la imputación de un hombre fiel como es el Fiscal General y ahora este varapalo en el caso Begoña.

Por lo menos alguien va a emitir el documental “4 estaciones” que nos muestra la vida diaria en Moncloa. Eran tiempos mejores cuando se rodó y viendo cómo están las cosas, ahora mismo cualquier parecido con la realidad puede ser pura coincidencia.